El campamento de la Fundación Mauricio Báez no sólo ha sido un lugar de esparcimiento para los niños de Villa Juana y sectores aledaños, sino que también se se ha convertido en un espacio de enseñanza.
Así lo aseguraron decenas de padres de los campistas, quienes resaltaron que los días del encuentro infantil ayudan a no desconectarse de los estudios en tiempos de vacaciones.
El campamento de este año, que se desarrolló del 10 al 28 de julio, contó con la participación de unos mil chiquillos entre las edades de 6 a 13 años.
La señora Gledis Soriano significó que el campamento desde su creación ha sido una iniciativa excelente.
“Son tres semanas de puro aprendizaje, donde ellos (niños) se sienten motivados. Espero que esto dure por muchos años más, porque es un gran aporte a la sociedad”, expresó Soriano.
Las hermanas Hiraldo, Cintia y Nidia, resaltaron las atenciones y seguridad que tienen los voluntarios con cada uno de los participantes.
Varios padres aprovecharon sus intervenciones para resaltar y agradecer el hecho de que la Fundación Mauricio Báez realice el campamento de verano libre de costo.
“Este campamento es un palo, porque le ofrece a los padres la oportunidad de envíar a sus hijos a un campamento de calidad, sin tener que pagar nada. En otros lugares este tipo de campamento cuesta entre 7 mil y 20 mil pesos”, señaló el señor Agripino Parra.
Impacto positivo
Así mismo se destacó el impacto positivo que tiene para la sociedad este tipo de actividades, ya que mantiene a los niños lejos de las calles y reduciendo el tiempo de ocio.
“Este tipo de actividades es muy positivo porque mantiene a los niños alejados de los dispositivos electrónicos, como tablet, celulares, computadoras y televisión”, dijo Carmen Shakira Beltrán.
La señora María Molina indicó: “Esto es algo que los niños necesitan, no solo en vacaciones, sino de dos a tres veces al año, porque aquí los niños se sienten altamente entusiasmados”.
El señor Iván Montero señaló que sus hijos se sintieron en ambiente.
“Mis hijos se sienten como si estuvieran con su familia. Están en otro campamento pero este es el que le gusta por la diversidad de actividades que realizan”, sostuvo Montero.
Fundación
El presidente de la Fundación Mauricio Báez, César Leonardo Heredia Guerra, puntualizó que los niños pudieron divertirse con las diferentes dinámicas que se realizaron, pero que además estuvieron envueltos en actividades de manualidades, clases de música, baile, deportes, así como en talleres y charlas, que le servirán a los campistas en su crecimiento personal.
“Los patrocinadores y colaboradores hacen que este campamento sea mejor cada año. Este es un campamento completo, donde el único requerimiento es que los niños hayan pasado de curso”, señaló Heredia Guerra.
Silvana Aquino, encargada del campamento, aseguró que los participantes vivieron unos días cargados de aventura, aprendizaje de valores y compresión.
“Han sido días maravillosos y emocionantes para ellos, que disfrutaron de todo lo que es el ámbito cultural y deportivo”, agregó Aquino.
Responsabilidad
Los voluntarios también dieron su parecer e indicaron que asumieron con mucha responsabilidad el reto de guiar a los pequeños.
“Fue una experiencia bastante agradable, porque los niños mostraron mucha destreza y agilidad”, dijo Doraina López, profesora de modelado en barro.
