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A los humanos nos encantan los extremos y los récords. Algunos ejemplos podrían ser la tortilla más grande del mundo, el perro más longevo del mundo o el edificio más alto del mundo, puesto que ostenta el Burj Khalifa, en Dubái. Una de las categorías que han llevado a un edificio europeo a entrar en el Libro Guinness de los récords es la de la construcción más pesada del mundo.
Pesar una edificación ya levantada no es muy viable, como podía ser la gran pirámide de Giza, pero conocer el peso de todos los materiales que se emplearon para la construcción de un edificio es más sencillo y nos da una idea de su peso total. Así, el Palacio del Parlamento de Rumanía, en Bucarest, actual sede del parlamento rumano, se llevaría el puesto número uno como el edificio más pesado del mundo.
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El Palacio del Parlamento de Rumanía, o la Casa del Pueblo, fue un proyecto arquitectónico solicitado por el dictador rumano Nicolae Ceausescu en 1980. Ceausescu, inspirado por los estilos de las grandes construcciones de Corea del Norte y de China, quería que se construyese en la capital una gran fortaleza, reflejo de su régimen dictatorial y que serviría como sede del régimen comunista.
Se terminó en 1997
Si bien el resultado fue impresionante, su construcción llevó varios años, y el dictador, asesinado en 1989, no pudo ver su obra terminada. La primera piedra del Palacio del Parlamento fue colocada por el propio Ceausescu en 1984. Como emplazamiento para el megaedificio se eligió parte de la ciudad de Bucarest, lo que implicó la demolición de una quinta parte de la ciudad, incluidos templos y hogares, y la reubicación sin remedio de 40.000 residentes.
Como se indica en la página web de los Récord Guinness, el edificio más pesado del mundo requirió de 700.000 toneladas de acero y bronce, combinados con 1 millón de metros cúbicos de mármol de Transilvania, 3.500 toneladas de cristal, 1.000 toneladas de basalto y 900.000 metros cúbicos de madera. Además, se necesitaron 550.000 toneladas de cemento y dos millones de toneladas de arena, sin contar todos los elementos para vestir su interior, como las 480 lámparas de araña, las 1.409 lámparas y espejos y los 200.000 metros cuadrados de alfombras tejidas.
El palacio cuenta con 12 plantas, 1.100 habitaciones y 20.000 plazas de aparcamiento
Las cifras a la hora de contratar a personal capacitado para su construcción también impactan. Se estima que en total se vieron involucradas más de 100.000 personas en su diseño y levantamiento, que culminó en 1997. El Palacio, dividido en doce plantas, alberga 1.100 habitaciones y 20.000 plazas de aparcamiento. Mide 270 metros de largo, 245 metros de ancho y 86 metros de altura, añadiendo otros 92 metros de salas subterráneas. Anca Petrescu fue la arquitecta jefa responsable de su diseño, y la empresa Aedificia Carpati se encargó de la construcción.
Como curiosidad, el Palacio del Parlamento de Rumanía también ostenta otro Récord Guinness, el del palacio estatal socialista más grande del mundo. Su superficie es de unos 340.000 metros cuadrados, más de diez veces la superficie que ocupa el Palacio de El Escorial. Su destino ha estado en vilo durante décadas, y los diferentes gobernantes de Rumanía pensaron en sacarle partido como centro comercial, casino o monumento comunista. Al final, se decidió emplearlo como la sede del Senado y de la Cámara de Diputados de Rumanía, y también alberga varios museos.
