Es un tema recurrente cuando un asesino desequilibrado lleva a cabo una matanza. Varios estudios lo niegan, pero siguen queriendo relacionar la violencia de los videojuegos, con la del mundo real.
Familiares de las víctimas del tiroteo en la escuela de Uvalde, en Texas, han denunciado a Activision, creadores de Call of Duty, a Meta, y al fabricante de armas Daniel Defense.
Se acaban de cumplir dos años de la terrible y sobrecogedora masacre de Uvalde. El 24 de mayo de 2022, el joven Santiago Rolando, de solo 18 años, entró en la escuela de primaria Robb, en Texas, y asesinó a 21 personas, la mayoría niños. También hirió a otros 17.
Vergonzosos errores policiales aparte (la policía tardó casi una hora en entrar en el edificio porque “estaban en desventaja táctica”), la investigación posterior determinó, entre otras cosas, que Santiago jugaba habitualmente a Call of Duty. Algo que, por otra parte, hacen muchos menores, pese a ser un juego para mayores de 18 años.
La denuncia contra Activision y Meta
Tal como informa TechCrunch, familiares de las víctimas han contratado al abogado Josh Koskoff, que ya ha ganado otros caso similares.
Según la demanda, “durante los últimos 15 años, dos de las mayores empresas tecnológicas de Estados Unidos han colaborado con la industria de las armas en un esquema que hace que la campaña Joe Camel parezca risiblemente inofensiva, incluso pintoresca”.
La demanda describe el juego Call of Duty de Activision, como “una astuta forma de marketing que ha ayudado a cultivar una nueva base de consumidores jóvenes para el rifle de asalto AR-15”.
Meta y la tienda de armas Daniel Defense también aparecen en la denuncia porque, según este abogado, “Instagram tiene unas normas endebles y fáciles de eludir, que permite la publicidad de armas en Instagram“. Meta prohíbe los anuncios de armas, pero da hasta diez avisos a los anunciantes, antes de sancionarlos. Vamos, que se pueden saltar la norma 10 veces…
Tal como confesó el propio asesino en redes sociales antes de la matanza, compró las armas en Daniel Defense, tras ver un anuncio suyo en Instagram.
En el caso de Call of Duty, abre de nuevo el debate sobre hasta qué punto la violencia militarista de este tipo de juegos, influye a la hora de fomentar la violencia en el mundo real.
Tras conocer la denuncia, Activision ha emitido un comunicado en el que transmite sus condolencias a la familia, y asegura que “millones de personas de todo el mundo disfrutan de los videojuegos sin recurrir a actos horribles”.
Recientes estudios han intentado buscar un vínculo entre la violencia virtual y la real, y no lo han encontrado.
Otro tema diferente es cómo los juegos militaristas fomentan la cultura de las armas, con financiación de la propia industria armamentística americana, y el propio ejército norteamericano, que incluso ha creado su propio juego.
La denuncia de los familiares de las víctimas de Uvalde a Call of Duty no es la primera. Es un tema recurrente en un país que vive con el miedo en el cuerpo cuando dejan a sus hijos en el colegio, o acuden a un centro comercial.
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Etiquetas: Videojuegos, ShareOnFB