NAVARRETE, Santiago.-Uno de los más grandes receptores del béisbol amateur de República Dominicana, Virgilio Veras, falleció la mañana de este sábado de un infarto.
La hija de Virgilio confirmó su deceso a las 9:30 de la mañana, en su residencia del municipio de Navarrete.
Virgilio tiene el mérito de ser la persona que llevó a Bartolo Colón donde Chilote Llenas y forzó para que fuera firmado por los Indios (hoy Guardianes) de Cleveland.
Llenas, quien dirigía la academia de Cleveland en el país, recuerda que Virgilio insistía en que lo firmara, ya que sería un gran lanzador.
A Bartolo Colón, se le considera el tercer mejor lanzador dominicano en Grandes Ligas, solo por debajo de Juan Marichal y Pedro Martínez.
Virgilio Veras: Reseña de mayo del 2022
Además de que tiene que jugar agachado sobre sus dos piernas, el cátcher debe cargar pechera, careta, rodilleras y un mascotín especial.
Pero además, en la parte mental debe conocer las debilidades y fortalezas de los bateadores contrarios, para conducir sus lanzadores y evitar el mayor daño posible.
En esa difícil posición de receptor, Virgilio Veras jugó durante 25 años en el béisbol amateur.
Con un hito, nunca bateó por debajo de la aristocrática cifra de 300, en esas dos décadas y media.
Virgilio nació el 5 de julio de 1950 en Villa Vásquez, donde comenzó a enamorarse del béisbol.
En su natal Villa Vásquez solo jugó una temporada, ya que su fama de excelente bateador corrió a voz en cuello.
Se jugó una doble cartelera entre Villa Vásquez y Navarrete, que se preparaba para la pelota amateur de Santiago y Virgilio bateó de 10-9.
Papi Bisonó y Miguel Sánchez lo reclutaron para el equipo amateur de Navarrete, municipio donde se quedó a vivir y ya tiene 53 años.
Además de Villa Vásquez y Navarrete, Virgilio Veras jugó en Mao, Santiago y la capital donde lo hizo para Meteoro y la UASD.
Aunque su carrera coincidió con la de Juan Piñao Ortiz, a quien define como un virtuoso de la receptoría, Veras estuvo en varios eventos internacionales defendiendo el país.
Estuvo en la Serie Mundial en 1972 en La Habana, Cuba y en 1973 regresó a ese país para otro evento internacional.
Su periplo además incluyó, Ecuador, Nicaragua, Puerto Rico, Canadá y el lejano Japón.
Pero hay una interrogante que muchos se hacen, ¿Por qué con tantas habilidades defensivas y ofensivas nunca fue firmado para el profesionalismo? La respuesta a esta pregunta en la siguiente entrega.
Aunque no eran tiempos en que abundaban las firmas para el béisbol profesional, hubo una razón física para que Virgilio Veras no lo lograra.
Virgilio tenía una pierna más larga que la otra, lo que impidió que los scouts se arriesgaran a darle un contrato.
Precisamente, su pierna izquierda, en la que tiene problemas de salud ahora, es de mayor longitud que su extremidad inferior derecha.
Aclaro, que una gran cantidad de jugadores han triunfado en el béisbol, a pesar tener una discapacidad o un miembro del cuerpo mutilado.
Virgilio Veras tiene una lapidaria frase que formar parte del argot beisbolero dominicano: “Si el quécher la apara, se le batea”.
La misma surgió en Curazao contra el lanzador Rumaldo Olivo, el cual estaba ponchando todos los bateadores dominicanos.
Nelson Llenas comentó que “A ese pitcher la bola no se le ve”, Virgilio respondió: “Si el quécher la apara se le batea” y predicando con el ejemplo, se dirigió al plato y le pegó doble.
Virgilio dice no olvida un partido que fueron a jugar a La Vega, donde Nelson Llenas pegó 3 jonrones en sus primeros 3 turnos y cuando iba agotar otro chance, el manager gritó del dogout: “Dale cuatro malas para que no pegue el cuarto”.
Otra anécdota que cuenta, es cuando trabajó con Águilas Cibaeñas y Rico Carty era del equipo, quien extrañamente jugaba con una cartera en un bolsillo.
Carty recibió un pelotazo cerca en la espalda y cuando Virgilio fue a prestarle atención, el Rico que era celoso con su cartera y sintiendo la mano cerca le gritó: “Novato, el pelotazo no fue tan bajito”.
Cuando jugaba en la pelota amateur de Santiago, Ramón De Luna, quien narraba, lo bautizó como “El Come Víveres”, apodo por el cual lo llaman muchas personas.
Virgilio Veras (VV), igual que Villa Vásquez donde nació, tuvo dos hijos que fueron firmados, Claudio y Edwin.
En su residencia de Navarrete visitamos junto a Eduardo Núñez a Virgilio Veras, quien no pierde el buen sentido del humor, a pesar de sus problemas en las piernas y auxiliarse por un bastón.
Foto
Virgilio Veras