La Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM) fue el escenario del Foro sobre la Reforma Laboral, donde representantes de sindicatos, empresas, organizaciones gubernamentales y académicos se reunieron para debatir y presentar sus posiciones sobre las propuestas de modificación legislativa.
El evento, que reunió a estudiantes, maestros e interesados en el tema, fue iniciado por el reverendo Secilio Espinal, rector de la PUCMM, quien destacó la importancia del diálogo entre las diferentes partes involucradas.
En el Código de Trabajo dominicano, el artículo 80 establece que “el empleador que ejerza el desahucio debe pagar al trabajador un auxilio de cesantía”, cuyo importe lo fija la misma ley y que en el extremo de los casos, indica que un empleado con más de cinco años deberá recibir el equivalente a 23 días de salario ordinario, por cada año de servicios prestados.
Este artículo no fue tocado en la propuesta sometida al Congreso Nacional, que ahora se encuentra bajo estudio de una comisión especial en el Senado de la República.
En ese sentido, la presidenta de la Confederación Patronal de la República Dominicana (Copardom), Laura Peña Izquierdo, dijo que no es la intención eliminar la cesantía “tratamos de generar un clima de negocios y un entorno más amigable para las mipymes”.
“Entendemos que la sustitución del régimen actual por otro, redundará en beneficio de sobre todo aquellos empleadores y trabajadores vinculados a las micros y pequeñas empresas”, resaltó.
Manifestó que la Patronal enfocó sus propuestas en tres ejes principales: procedimientos, jornada laboral y costos derivados de la relación de trabajo.
Mientras que César Dargam, vicepresidente ejecutivo del Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep), expresó que durante más de una década, múltiples esfuerzos han procurado la anhelada reforma laboral y reconoció que existen avances importantes en esta etapa.
“Planteamos explorar y poder ponderar diferentes modalidades que permitan traer mayor certeza al trabajador, pero también mayor certidumbre a la empresa”, indicó Dargam.
Propone plazo de un año
Manuel Ramón Herrera Carbuccia, presidente de la Academia de Ciencias de República Dominicana (ACRD), sostuvo que hay varios aspectos en la propuesta de reforma a esta pieza legislativa, con los cuales no está de acuerdo.
Resaltó que la nueva estructura de la reforma laboral, plantea que habrá un juez de fondo y conciliador para los casos laborales que vayan a los tribunales.
“Ahora mismo tenemos seis salas para casos laborales en el Distrito Nacional y tres jueces funcionando. Esos tres tiene que cubrir los seis tribunales. Si ahora faltan jueces, cuando sean un juez de fondo y un conciliador, no sé cómo se va a resolver esa situación”, cuestionó Herrera.
Héctor Arias Bustamante, presidente de la Asociación Dominicana de Derecho de Trabajo y la Seguridad Social (ADTSS), dijo que la reforma laboral, “quizás no podrá llenar todas las expectativas, pero será un importante paso para adecuar el derecho del trabajo a los nuevos tiempos sin apartarse de su esencia protectora”.
En ese sentido, Milton Ray Guevara, expresidente del Tribunal Constitucional, propuso que las partes involucradas en la reforma laboral se den un plazo de un año para buscar una solución a las diferencias con respecto a la propuesta.
“Avancemos, señores, que este país necesita eso. Nosotros necesitamos que aquí se apoye, se logre este acuerdo, que ya se logró y si hay un solo punto en el cual hay divergencia, dense un plazo de un año”, expresó.
No ha habido un consenso total en la reforma laboral
En contraposición a esta propuesta, por el sector trabajador, Rafael “Pepe” Abreu, presidente de la Confederación Nacional de Unidad Sindical (CNUS), aclaró que la cesantía laboral no se incluyó en la reforma laboral porque las partes “no nos pusimos de acuerdo, por eso no se incluye”.
“Lo que ha surgido con la entrega final, no ha sido por falta de diálogo no, ha sido porque hay intereses enfrentados que no han permitido un consenso total”, resaltó.
Añadió: “Un foro convocado por una academia como esta (PUCMM) y por quienes están aquí, obliga a cualquiera a estar presente aquí, pero el estar presente no quiere decir que nosotros estemos con el ánimo”.
Recordó que la República Dominicana alcanzó el nivel desarrollo económico más alto de la región, con la misma cesantía que establece el Código de Trabajo del 1992.
Frente a esta posición, el ministro de Trabajo, Luis Miguel de Camps, resaltó que sería “una irresponsabilidad” volver la pieza a una especie de parálisis y abogó por que la propuesta sea a futuro complementada. “Debemos hacernos la pregunta… ¿Si lo propuesto es positivo en balance y no impide que otras cosas sean posteriormente construidas? Avancemos, realmente sería contraproducente para el país volver hacia atrás”, dijo.
