El 24 de diciembre es considerado el Día Nacional del Tubi, una festividad que no tiene base legal, pero sí un gran respaldo popular entre miles de dominicanas que se realizan el típico peinado desde tempranas horas de la mañana del día en que se celebra la Nochebuena.
En un recorrido por diferentes sectores del Gran Santo Domingo, Diario Libre pudo constatar a decenas de mujeres en las calles con el peinado de los pinchos y la redecilla.
“Yo me suelo hacer tubi en fecha como esta, porque mientras estoy en la cocina o haciendo cualquier tarea del hogar, protejo el cabello del calor y evito que tome ondas”, explicó una mujer que solo se identificó como Elizabeth.
La estilista Yeimy, propietaria del salón que lleva su nombre en Villa Blanca, Sabana Perdida, municipio Santo Domingo Norte, atribuye la popularidad que ha adquirido el peinado en los últimos años debido a que es una forma de conservar el pelo lacio y manejable por más tiempo.
¿Cómo se realiza un tubi?
“Consiste en envolver el cabello alrededor de la cabeza y sujetarlo con pinchos o pinzas, finalmente se coloca una redecilla que brinda el toque final”, asegura la experimentada salonista de Sabana Perdida.
Yeimy, quien ha ejercido el estilismo por más de 20 años, explica que el tubi es más común entre quienes tienen el pelo crespo, aunque a veces las mujeres con cabello lacio, también se lo realizan.
En los barrios de Santo Domingo, el precio de lavarse el cabello y secarlo a blower (con tubi incluido), suele costar entre RD$400 y RD$600.
Orígenes
Las investigaciones sobre el tema no señalan un lugar ni fecha específica de su surgimiento, aunque coinciden que es en República Dominicana y en Puerto Rico donde más se usa el cabello en esta forma. Los boricuas suelen llamarlo “dubi dubi“.
La folklorista Xiomarita Pérez asegura que el peinado no es tan nuevo, pero fue en los últimos tiempos cuando adquirió este auge: “Yo recuerdo que llegué a hacerme tubi hacia finales de los años 70, en aquella época uno se pasaba la tenaza y luego se hacia el tubi, pero no era un peinado para salir de casa, como lo es ahora”.
Expone que en aquellos años, el proceso era muy tortuoso, pues había que calentar una tenaza de metal en un anafe con carbón para luego pasársela por el pelo, al que previamente le aplicaban vaselina.
“Años atrás este peinado era para estar en la casa, antes de salir a algún lugar, pero ahora uno ve el tubi donde quiera; lo vemos en el metro, en la guagua; principalmente las mujeres de la diáspora dominicana, lo usan hasta en el avión cuando se van de viaje”, explica la analista de la transformación de la cultura.
La moda del tubi
Xiomarita explica que el peinado de las pinzas y la redecilla no es el fin último, es más bien la antesala de algo: “Fíjate que una mujer no suele usar un tubi en una cita con su enamorado, lo usa previamente para que su pelo luzca espléndido”.
En 2013 la cantante Rihanna dio al tubi uno de los empujes que contribuyó a su expansión y viralización mundial cuando acudió a la gala de los American Music Award (AMA) con el típico peinado.
Una década más tarde, el tubi se utiliza hasta en las aulas universitarias, plazas y oficinas, muchas de las mujeres que lo llevan lo exhiben con orgullo, haciendo honor a la frase que reza: “Lo que está a la moda, no incomoda”.