Corea del Sur está contemplando levantar la prohibición de facto sobre la inversión institucional en criptomonedas. Esta decisión se alinea con las promesas de campaña del presidente Yoon Suk-yeol, quien ha promovido un sector de activos digitales más fuerte en el país asiático. La noticia cobra especial relevancia justo cuando Donald Trump está a punto de asumir como el primer presidente pro-bitcoin de Estados Unidos.
La Comisión de Servicios Financieros (FSC), el principal regulador financiero de Corea del Sur, informó sobre su intención de permitir gradualmente que las instituciones abran cuentas comerciales en exchanges de criptomonedas, comenzando con organizaciones sin fines de lucro. Este cambio representa un giro significativo en la política de criptoactivos del país, que hasta ahora, solo permitía a comerciantes minoristas verificados participar en el comercio de bitcoin y otras criptomonedas.
Este movimiento forma parte de un plan regulatorio más amplio. Esto tomando en cuenta que la FSC trabaja en el desarrollo de un marco legal adicional que sigue a la Ley de Protección del Inversor en Activos Virtuales, que entró en vigor el año pasado. La próxima fase de la legislación se centrará en la regulación de stablecoins, exchanges de criptomonedas y listados de tokens, además de introducir un sistema de selección para los principales accionistas de proveedores de servicios de activos digitales.
Este paso hacia la liberalización de la inversión institucional en criptomonedas en Corea del Sur podría disparar el volumen de comercio en el país y con ello a nivel global. Eso es algo que ya viene sucediendo, ya que la inversión institucional en bitcoin ha estado rompiendo récords y, con el segundo mercado más importante en el comercio de BTC, la inversión institucional en la moneda digital podría elevarse a niveles estratosféricos.
Eso es porque Corea del Sur se ha convertido en un mercado clave para el comercio de bitcoin. Desde inicios del año pasado, junto con otros países asiáticos, ha sido responsable de aproximadamente el 70% del volumen total de negociación de BTC. Durante este periodo, Asia gestionó transacciones por 791.000 millones de dólares del total de 1,17 billones de dólares en bitcoin intercambiados globalmente. Esto dejó al mercado norteamericano significativamente rezagado, con solo 113.000 millones de dólares negociados, subrayando así el dominio asiático, y por ende también el de Corea del Sur, en el comercio de criptomonedas.
La legalidad de la negociación y posesión de bitcoin en Asia varía ampliamente entre jurisdicciones: Japón cuenta con regulaciones relativamente liberales, en contraste con China, donde hay una prohibición vigente. En Corea del Sur, los ETF de bitcoin al contado enfrentan restricciones, pero esto podría estar a punto de cambiar.
En sí, actualmente solo las cuentas que han completado la verificación de identidad bajo la Ley de Información Financiera Especificada (Ley de Dinero Especial) están autorizadas a invertir en activos virtuales. Y aunque no existen restricciones legales explícitas para que las personas jurídicas emitan cuentas de nombre real, la Autoridad de Servicios Financieros ha instruido a los bancos para que no abran estas cuentas para entidades corporativas.
Como se mencionó anteriormente en este artículo, la FSC está elaborando un plan detallado para permitir gradualmente que las organizaciones sin fines de lucro abran cuentas verificadas mediante el Comité de Activos Virtuales en el corto plazo. Esto implica que Corea del Sur está a punto de reconfigurar el mercado asiático de criptoactivos, estableciendo un precedente significativo para la regulación de activos digitales en otras naciones, precisamente en un momento en que el mundo requiere más líderes que apoyen al sector de los activos digitales.