¿Hasta qué punto la TDT continúa siendo importante? Por mucho que la televisión tradicional haya perdido protagonismo en favor de las plataformas de streaming, las redes sociales, Internet y demás propuestas actuales, nadie duda de que su influencia continúa siendo considerable. Por eso no es extraño que de vez en cuando surjan polémicas como la que ha protagonizado Francia recientemente.
Si se hace un resumen de lo sucedido, la historia parece simple: las autoridades audiovisuales francesas han decidido quitar la de programación dos canales de televisión. Y no precisamente por falta de audiencia, puesto que ambas cadenas tenían unos índices de espectadores realmente altos. Los motivos han sido otros. ¿Podría suceder algo similar realmente en España?
La polémica de la TDT francesa
Lo sucedido es lo siguiente: quienes mandan en la TDT francesa, han tomado una decisión cuanto menos controvertida: quitar de en medio a dos canales de bastante éxito. Para ser concretos, no han renovado su presencia en la televisión. Es decir, que ambos podrían continuar emitiéndose por ejemplo a través de Internet, pero no ha sido el caso, finalmente han decidido echar el cierre.
Los dos canales, C8 y NRJ12, aunque sonaran un poco a androides de Star Wars, eran muy diferentes entre sí. El primero de ellos, de carácter conservador, era el más polémico sin duda. De hecho, llevaba tiempo protagonizando distintos altercados. ¿Dónde termina la libertad de expresión realmente? Al parecer, incitaba al odio y a la homofobia, o eso es lo que se ha argumentado.
De hecho, su historia no es nueva. El canal llevaba ya acumulados varios millones de euros en multas, debido a lo complicado de algunos de sus contenidos. Bueno, pues eso ya no sucederá más. Por supuesto, la decisión ha creado un gran revuelo en el país vecino, e incluso aquellos que están lejos de simpatizar con su visión política, han criticado la censura que se ha experimentado.
Todavía más extraño parece el caso de NRJ12, que más bien podría definirse como una especie de canal de contenidos juveniles. En los últimos tiempos, su propuesta se limitaba a poco menos que teletienda y la reposición en bucle de algunas series juveniles. Motivos suficientes para que las autoridades hayan tomado la misma decisión: sacarlo de la TDT de forma definitiva.
¿Podría suceder algo similar en España?
Aunque cada país cuenta con sus propias políticas, es imposible fijarse en lo sucedido en Francia y pensar en qué ocurriría si aquí se tomara una decisión similar. Desde luego, no hace falta tener una imaginación fabulosa para caer en la cuenta de que muchos serían los espacios que correrían la misma suerte que estos dos canales galos: terminar fuera de la TDT sí o sí.
¿Cadenas politizadas con adoctrinamientos definidos? ¿Canales que emiten las mismas series una y otra vez sin el mejor esfuerzo por proponer algo nuevo? En realidad, encontrar símiles en España no sería demasiado difícil, no. Por suerte o por desgracia, no parece que aquí vaya a suceder lo mismo. Al menos, de momento.
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Etiquetas: Televisión, TDT
