Últimamente, todo parece ser más inteligente. Al menos, en lo que se refiere a los dispositivos domésticos. Uno de los artículos más de moda en ese sentido son los enchufes, capaces de regular cualquier cosa desde el teléfono móvil. Por ejemplo, para apagar o encender las luces cuando uno no está en casa. Pero a pesar sus ventajas, también requieren algunas precauciones.
Así lo revelan los expertos, que advierten de que hay una serie de elementos que nunca convendría conectar en un enchufe inteligente. Incluso aunque a veces sus responsables se olviden de alertar sobre ello como deberían. Además, argumentan las razones de su postura. La principal causa, claro, es la seguridad: incluso podrían provocar un incendio. Pero no es la única razón que existe.
Dispositivos que nunca deberías conectar a un enchufe inteligente en casa
Window Socket
Los primeros dispositivos que, como dicen en medios especializados, nunca deberías conectar a un enchufe inteligente son los llamados electrodomésticos de alto consumo energético. La explicación de los expertos es sencilla: Estos aparatos requieren una cantidad significativa de energía y pueden sobrecargar un enchufe inteligente, lo que podría provocar un incendio si no se tiene cuidado.
Estaríamos hablando de calentadores de agua, estufas, refrigeradores, estufas y cosas por el estilo. Y lo mismo sucede con los electrodomésticos con protecciones de seguridad integradas. Así dicho, puede sonar a cosas muy raras, pero en realidad suelen ser cacharros que están en todas las casas, como sin ir más lejos los secadores de pelos o las típicas planchas para planchar la ropa.
¿Y por qué resultan peligrosos? Pues básicamente porque cuentan con interruptores de circuito de falla a tierra integrados en su propio enchufe. Son funciones de seguridad que, al emplearse en un enchufe inteligente, pueden verse reducidas. En algunos casos, incluso interferir por completo en ellas. Por ese motivo los expertos recomiendan no conectarlos cuando se utilicen.
Conviene también recordar que los enchufes inteligentes suelen contar con una capacidad de carga máxima de entre 10 y 15 amperios. El riesgo está en que muchos dispositivos de alto voltaje superan esa medida con creces. Por eso antes de conectar un buen número de electrodomésticos, sobre todo en caso de tener dudas, conviene echar un vistazo a sus especificaciones técnicas.
La salud es lo primero, y conviene no jugar con ella
Un caso distinto y a la vez análogo es el que representan los llamados equipos médicos esenciales. Es decir, aquellos dispositivos que pueden ser de vital importancia para algunas personas enfermas. Dos casos muy claros son los de las bombonas de insulina o los concentradores de oxígeno. No porque sean incompatibles con los enchufes inteligentes, sino por algún despiste.
Con un enchufe inteligente es mucho más probable que se apaguen por accidente, lo cual puede arrastrar consecuencias dramáticas. En resumen, aunque los enchufes inteligentes sean muy prácticos en un gran número de casos, e incluso recomendables, también necesitan una serie de precauciones. De lo contrario, los riesgos pueden ser incluso mayores que sus ventajas, que las tienen.
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