Viaje por las estatuas gigantes de Buda: cuántas quedan en pie y dónde se encuentran

Si hay algo interesante que tienen las religiones, espiritualidad aparte, es la iconografía que a lo largo de los siglos se nos ha proporcionado. En Occidente contamos con cuadros, catedrales o estatuas que representan a Cristo. El Islam no permite representar animales o personas, y es por ello mismo que no hay dibujos de Alá o Mahoma puesto que se considera que es algo así como un intento de “imitar a Dios”, creando. En el caso de los budistas, por otra parte, podemos encontrar estatuas por toda Asia (y alguna en menor tamaño en los jardines de aquellos que creen en el Feng Shui y en el New Age).

La palabra buda significa despertar, y aunque en los tiempos remotos no era común ver representaciones del mismo en forma humana, con el paso del tiempo el arte evolucionó hasta convertirse en una figura antropomórfica (algunos apuntan a la influencia griega). Hay muchísimas estatuillas, pero también estatuas grandes del asceta repartidas por Asia, cada una con idiosincrasia propia: los hay gordos, dorados, sonrientes, compasivos… aunque tienen características en común, como la postura meditativa, los mudrās (o gestos de las manos) o las orejas largas, por nombrar algunas.

Todas las estatuas tienen características en común, como la postura meditativa, los mudrās (o gestos de las manos) o las orejas largas

Además, las posturas suelen variar: sedente, reclinado, pedestre, demacrado (representado en periodo de ayuno), gordo y sonriente… alrededor de Asia hay multitud de estatuas de Buda, aunque en otro tiempo hubo muchas más que las barbaries se han encargado de borrar de la faz de la Tierra. Ejemplo de ello eran los famosos Budas de Bāmiyān en Afganistán, tallados en piedra probablemente durante el siglo V y que, sin embargo, sucumbieron en 2001 durante la guerra.

Ha habido en la historia y repartidas por el globo más de 30 estatuas del maestro espiritual, y hoy te mostramos algunas de las más impresionantes que todavía siguen en pie.

Gran Buda de Phuket (Tailandia)

La tercera estatua más grande de Buda de Tailandia es relativamente reciente (su construcción comenzó en 2004). Por delante de ella se encuentran el llamado Gran Buda de Tailandia, de tono dorado y la segunda estatua más alta del sudeste asiático, y Luangpho Yai. Mide 45 metros.

Representa a Gautama sentado y está hecha de hormigón. La iconografía de Buda en Tailandia y Laos en concreto recuerda episodios específicos de sus viajes y enseñanzas, familiares para los budistas.

La idea es que, al crear una imagen de Buda, se espera que el artista se encuentre en un estado espiritual y mental que le permita visualizar esta idea. No existe ningún requisito de que todas las imágenes de Buda sean idénticas, aunque sí deben cumplirse unos parámetros como los que señálabamos al principio.

Al crear una imagen de Buda, se espera que el artista se encuentre en un estado espiritual y mental que le permita visualizar esta idea

Gran Buda de Leshan, Sichuan (China)

La estatua en piedra esculpida más grande del mundo es bastante más antigua que la de Phuket. Fue construida durante la dinastía Tang (que gobernó desde el 618 hasta el 907). Es muy impresionante porque se encuentra en un acantilado y cuando se esculpió tenía a su cargo hacer más lentas las mareas, proteger los barcos e impedir la inundación de la aldea vecina.

Mide 71 metros y, como nosotros conocemos la frase “si Mahoma no va a la montaña, la montaña irá a Mahoma”, en el pueblo colindante hay un precepto parecido que explica que La montaña es Buda y Buda es la montaña, puesto que la colina en la que se encuentra la estatua parece un Buda acostado.

El Buda de Ushiku, (Japón)

Mide 120 metros y es tres veces más grande que la Estatua de la Libertad. En realidad es un edificio y tiene cuatro pisos y dentro de ella se pueden adquirir souvenirs, y en las afueras comidas o bebidas, además de poder aparcar vehículos. Contiene en su interior un museo con imágenes de Buda y un centro de adoración.

Buda Reclinado en Bangkok Wat Pho (Tailandia)

De nuevo en Tailandia, el templo Wat Pho acoge a este singular Buda en posición reclinada que mide 46 metros de largo, convirtiéndose así en la estatua tumbada más grande del país del sudeste asiático. Está hecho de pan de oro y es el principal reclamo para los turistas que se acercan al antiguo templo, erigido en el siglo XVII.

Gran Buda de Tian Tan (cerca de Hong Kong)

Terminada un 21 de diciembre de 1993, día que los chinos consideran de la ‘iluminación de Buda’. Mide 34 metros y se encuentra en la Isla de Lantau, en Hong Kong. Está rodeada por seis estatuas más pequeñas de bronce conocidas como “La Ofrenda de los seis Devas” que se presentan ofreciendo flores, incienso, lámparas, ungüentos, frutas y música al Buda.

Estas ofrendas simbolizan las Seis Perfecciones: caridad, moralidad, paciencia, celo, meditación y sabiduría, todas necesarias para alcanzar la Iluminación. Si hace un día despejado, se puede ver desde Macao.

Si hace un día despejado, esta estatua se puede ver desde Macao

Chaukhtatgyi Buddha Temple, Yangon (Myanmar)

Quizá peque un poco de hortera, aunque en un mundo plagado de estatuas de pan de oro gigantes tampoco nos podemos poner muy exquisitos. En este caso, se encuentra en Myanmar, mide 68 metros y es una de las más veneradas del país.

Aunque su construcción fue entre finales del siglo XIX y principios del siglo pasado, en 1950 fue demolida y se reemplazó la imagen. Como curiosidad: los ojos están hechos de vidrio.

Si hay algo interesante que tienen las religiones, espiritualidad aparte, es la iconografía que a lo largo de los siglos se nos ha proporcionado. En Occidente contamos con cuadros, catedrales o estatuas que representan a Cristo. El Islam no permite representar animales o personas, y es por ello mismo que no hay dibujos de Alá o Mahoma puesto que se considera que es algo así como un intento de “imitar a Dios”, creando. En el caso de los budistas, por otra parte, podemos encontrar estatuas por toda Asia (y alguna en menor tamaño en los jardines de aquellos que creen en el Feng Shui y en el New Age).