Un grupo de accionistas de las Águilas Cibaeñas sometió una demanda en arbitraje institucional para que sea declarada nula la Asamblea General Ordinaria Anual de la organización, celebrada el pasado 14 de junio de 2025, en la que fue reelecto Víctor García Sued como presidente del Consejo Directivo para el período 2024–2025.
La acción, representada por los abogados José Orlando García, Algenis Almonte Paulino e Ylonka Bonilla Santos, fue presentada ante la Corte de Arbitraje y Resolución Alternativa de Conflictos de la Cámara de Comercio y Producción de Santiago, conforme lo establece el pacto estatutario de la sociedad Águilas Cibaeñas, S.A.S.
En el expediente, que consta de 103 páginas, se señala que el proceso de impugnación se fundamenta en disposiciones del artículo 63 del reglamento vigente de dicha corte, que otorga un plazo de quince días para contestar la demanda.
Según el acto de notificación, los demandantes —entre ellos Adriano Valdez Russo, Enrique Adriano Valdez Russo, Quilvio Tomás Hernández Casanova y otros accionistas— alegan que la asamblea celebrada en junio debe ser invalidada.
En la asamblea cuestionada, además de ratificar a García Sued, se confirmaron en sus cargos a Kristen Castro como vicepresidenta, Fabio Jorge como tesorero e Iris Núñez como secretaria, junto a los vocales Debbie Lawrence, Lionel García, Carlos Sánchez, Juan Sánchez Núñez y María Virginia Jorge de García. La directiva también aprobó mayor autonomía para René Francisco en sus funciones como vicepresidente de Operaciones de Béisbol.
El artículo séptuagesimo cuarto de los estatutos de Águilas Cibaeñas establece que cualquier controversia entre accionistas, o entre estos y la sociedad, debe dirimirse exclusivamente ante el Consejo de Conciliación y Arbitraje de la Cámara de Comercio y Producción de Santiago, renunciando a otras vías judiciales, salvo en casos excepcionales previstos por la ley.
La Corte de Arbitraje y Resolución Alternativa de Conflictos será la encargada de conocer el fondo del caso y decidir si procede o no anular la asamblea.
De acogerse la demanda, el equipo cibaeño tendría que convocar nuevamente a sus accionistas para elegir o ratificar a su consejo directivo, lo que podría alterar la actual estructura de mando a pocos meses del inicio de la temporada de béisbol invernal.