Este sábado se cumplen cinco años de la icónica fotografía que marcó el inicio oficial de la pandemia de COVID-19 en el país. La imagen, aparentemente inocente, mostraba a un hombre de rostro cansado, con cubrebocas y la mano alzada en forma de saludo, tomada el primero de marzo de 2020.
Ese hombre, Claudio Pasqualini, un italiano de 62 años, se convirtió en el primer caso confirmado de coronavirus en la República Dominicana.
Pasqualini había llegado al país un mes antes, sin mostrar síntomas, pero días después desarrolló tos, fiebre y otros síntomas gastrointestinales, lo que lo convirtió en el paciente cero. Según el informe oficial de las autoridades de salud en ese momento, su caso fue el primero identificado como positivo de COVID-19 en territorio dominicano.
A pesar de la alarma inicial, el Ministerio de Salud Pública pidió calma a la población. Sin embargo, lo que siguió fueron meses de caos: aislamiento, crisis sanitaria, muertes, restricciones, cuarentenas, toques de queda, vacunas y un clima generalizado de miedo.
Con el tiempo, Pasqualini se ganó el apodo de “el italiano” en las redes sociales y los medios, siendo objeto tanto de estudios médicos como de aislamiento y otros protocolos para combatir la pandemia. A la par, su caso se convirtió en un tema de conversación y, en ocasiones, objeto de memes en internet.
En esa fecha, Italia ya había registrado 888 casos confirmados de COVID-19, mientras que el número de contagios a nivel mundial había ascendido a 85,403 en 54 países.
Pasqualini recibió el alta médica 53 días después de su ingreso al Hospital Militar Ramón de Lara, en San Isidro, Santo Domingo Este. El 22 de abril de 2020, salió del hospital entre aplausos del personal médico, levantando las manos en señal de victoria y todavía con cubrebocas, ya que el coronavirus seguía siendo una amenaza real en ese momento.
Covid-19 actualmente
El pasado 20 de febrero, en la Semana Epidemiológica SE-06, la Dirección de Epidemiología notificó 7 nuevos casos de Covid-19, con lo que se sumaron un total de 40 el presente año.
En esos días, el infectólogo Clemente Terrero advirtió sobre la persistencia del COVID-19 y la circulación simultánea de diversos virus respiratorios, lo que ha llevado a una prolongación de los síntomas en algunos pacientes hasta de siete días.
Durante su participación en el programa “Hola Doctor”, transmitido por Radio Monumental en Santiago de los Caballeros, Terrero indicó que actualmente no solo circulan virus tradicionales como la influenza y el adenovirus, sino que hay una combinación de patógenos que pueden estar afectando la evolución de la enfermedad.
Asimismo, destacó que las vacunas contra el Covid-19 han jugado un papel crucial en la protección de la población. El especialista aclaró que, si bien las vacunas no impiden la infección, su principal beneficio es prevenir formas graves de la enfermedad y reducir la mortalidad, especialmente en personas con enfermedades preexistentes.