Administradores y comunitarios del municipio de Haina, provincia San Cristóbal, especificamente de la Duarte, denunciaron un “exceso policial“, situación que, alegan, está afectando sus negocios y la vida social en la demarcación.
Mediante declaraciones escritas, dijeron que hay una situación de zozobra provocada por agentes de la Policía Nacional antes de la medianoche, cuando los negocios de expendio de bebidas alcohólicas deben cerrar sus puertas al público.
Señalaron que los agentes lanzan bombas lacrimógenas y montan operativos innecesarios como si estuviesen en persecución de delincuentes peligrosos.
Los denunciantes llamaron la atención de la ministra de Interior y Policía, Faride Raful, a fin de que se ponga freno a la situación que perjudica sus negocios y el derecho a la recreación de la comunidad.
Aseguraron que en otros municipios la Policía se limita a garantizar el orden público y a que los establecimientos no violen el horario establecido de operación.
