Las sondas, naves espaciales y satélites que se mueven por el espacio utilizan, principalmente, energía solar, energía nuclear o combustible para propulsarse. La startup británica Magdrive tiene una nueva propuesta: emplear metal como fuente de energía.
La elección no es aleatoria. Magdrive se ha dado cuenta de que en el espacio hay una gran cantidad de basura espacial. Si un satélite puede alimentarse de ella, podría obtener energía casi infinita. Con un efecto secundario muy importante: acabar con la basura satelital.
Incluso podrían construirse “camiones de la basura” espaciales, que se dedicasen solo a esta tarea.
Usando metal como combustible de naves espaciales
Tal como explican los fundadores de la compañía en una entrevista en la CNN, la mayoría de los sistemas eléctricos que se emplean en el espacio generan energía ionizando gas a presión.
El dispositivo inventando por Magdrive, que ha bautizado con el nombre de Warlock, genera electricidad ionizando metal sólido, que extraería de los satélites muertos que flotan en el espacio.
“La propulsión química tiene un empuje muy alto, pero su eficiencia -o sus millas por litro, si se quiere- es muy pobre”, explica el fundador de Magdrive, Mark Stokes, a la CNN.
“En cambio, los sistemas de propulsión eléctrica actuales tienen las características totalmente opuestas. Poseen un empuje muy bajo, pero una eficiencia excelente, muchas millas por litro”, continúa.
“Estamos construyendo el primer sistema de este tipo que tiene lo mejor de ambos mundos. Es propulsión eléctrica, pero aporta una mejora de magnitud en empuje, con una reducción de magnitud en volumen y masa”.
Debido a su pequeño tamaño, este sistema de impulso alimentado por metal, se podrá instalar en cualquier satélite.
Suena demasiado bueno para ser verdad. Y por ahora lo es. Porque este Magdrive Warlock, de momento, es poco más que teoría. Pero una teoría que está a punto de ponerse en práctica, al menos como prueba de concepto.
El próximo mes de junio tienen pensado lanzar un satélite con el que intentarán ionizar metal, para obtener un punto de partida.
A esta nave espacial que usa el metal de satélites muertos como fuente de energía aún le quedan años de desarrollo. Pero si Magdrive consigue su objetivo, puede ser una forma interesante de acabar con la basura espacial.
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Etiquetas: NASA, Curiosidades