Panorama Nacional. El Fondo Agua Santo Domingo (FASD) resaltó que en una década esa entidad se consolidó como un modelo de inversión y gobernanza, logrando resultados cuantificables que impactan directamente en la seguridad hídrica del Gran Santo Domingo, entre ellas se destaca el reabastecimiento de 1.4 millones de metros cúbicos de agua anualmente y una reducción estimada de 1,680 toneladas de dióxido de carbono.
Al pronunciar las palabras centrales del acto de celebración del décimo aniversario de FASD, el vicepresidente de su junta directiva, Juan Roberto Amell, enfatizó el retorno económico y ambiental que ha generado este mecanismo de alianzas público-privadas.
Indicó que la data operativa también reveló que el Fondo impulsó la siembra de 1,708,919 plantas y logró la restauración de más de 1,350 hectáreas mediante reforestación y sistemas agroforestales, además del mantenimiento de 1450 hectáreas y la conservación de unas 700 hectáreas en zonas críticas de las cuencas del Haina, Nizao y Ozama-Isabela.
Amell atribuyó el éxito del FASD a su arquitectura financiera, basada en un fideicomiso filantrópico de largo plazo, un mecanismo que, según el ejecutivo, permitió trascender los ciclos económicos y políticos, asegurando la continuidad de los proyectos de infraestructura verde.
En la actividad, efectuada en el salón empresarial de la torre AIRD, el vicepresidente de la junta directiva también señaló que la inversión en campo generó beneficios directos e indirectos para más de 2,700 beneficiarios en comunidades de la cuenca alta, demostrando que la conservación es un motor de desarrollo social y económico.
Manifestó que este modelo de acción coordinada y transparente, que articula al sector público, como el Ministerio de Medio Ambiente y la Corporación de Acueducto y Alcantarillado de Santo (CAASD) y al sector privado, demostró ser una herramienta poderosa para la gestión ambiental medible.
Amell precisó que el FASD implementó 15 proyectos enfocados en prácticas sostenibles, lo que permitió avanzar en la gestión integrada del agua y en la adaptación al cambio climático, con un estricto protocolo de rendición de cuentas que incluyó la elaboración de memorias anuales y auditorías externas.
En su llamado final, el vicepresidente de la junta directiva de FASD invitó a nuevos donantes a sumarse a esta plataforma probada, enfatizando que cada aporte se traduce en beneficios ambientales, sociales y económicos. El acto marcó el inicio de una nueva etapa en la que la entidad buscará escalar sus intervenciones y fortalecer su trabajo comunitario para blindar la seguridad hídrica de la capital dominicana.
A la actividad contó con la asistencia del ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Armando Paíno Henríquez; el director general de la Corporación de Acueducto y Alcantarillado de Santo (CAASD), Felipe Suberví; miembros de la junta directiva y de la asamblea de socios del FASD, la directora ejecutiva del Fondo, Patricia Abreu, así como a representantes de empresas, fundaciones, organismos de cooperación y organizaciones comunitarias.




