Ya fuese por medio de la religión, la espiritualidad o, cómo no, la ciencia ficción, el ser humano siempre ha buscado la inmortalidad de una forma u otra.
De hecho, los grandes clásicos llevan siglos tratando ese tema, algunos con más ingenio e imaginación que otros. Pero aún así, pocos han creído que la gente podría vivir más gracias a simplemente una inyección.
Pues bien, por sorprendente que resulte, así lo ha puesto de manifiesto un nuevo estudio, publicado por el prestigioso medio Nature, que no es cualquier cosa. Según él, podría ser un acercamiento a la inmortalidad, por así decirlo, ya que permitiría vivir un 25% más. Curiosamente, no ha sido la única publicación de este tipo que ha visto la luz recientemente, ¿a qué se debe?
Una inyección para vivir un 25% más
Según los responsables del estudio, la clave podría estar en una proteína llamada IL-11, y que habitualmente está ligada al envejecimiento. La teoría es bastante sencilla: al reducir o eliminar directamente ésta del organismo, cualquiera podría tener una esperanza de vida bastante más larga de lo que suele considerarse normal, y quizá también más sana.
¿Y qué pasa en la práctica? Pues que, a diferencia de lo que suele suceder con este tipo de experimentos, que por lo general suelen quedarse en nada casi antes de empezar, esta inyección “para la longevidad” ya habría funcionado con éxito. Al menos, en ratones. Roedores y humanos comparten la proteína IL-11, por lo que si funciona en los primeros, ¿por qué no en las personas?
Al parecer, los ratones que han sido tratados de esta forma, no solo aumentaron su habitual esperanza de vida un 25%, sino que también se mostraron más resistentes a lo que es frecuente en ellos. De esta forma, los científicos no descartan que en algún momento del futuro se puedan aprovechar estos descubrimientos con distintos fines clínicos.
De hecho, aunque no pueda decirse que el tratamiento, si se le quiere llamar así, esté precisamente avanzado, lo cierto es que hace ya tiempo que la proteína IL-11 se está estudiando meticulosamente para poder utilizarse, al menos potencialmente, en algunos tipos de cáncer o incluso en pacientes que sufren otras enfermedades como la fibrosis.
Los experimentos en humanos
Aún así, la relación entre la proteína IL-11 y el envejecimiento se descubrió prácticamente por puro azar, aseguran. Al poner la lupa en una rata adulta, los investigadores descubrieron que sus niveles de esta proteína eran considerablemente más altos que cuando hacían lo propio analizando ratas más jóvenes.
Aunque todavía es pronto para saber si esta inyección podría tener el mismo efecto en los seres humanos, los científicos parecen optimistas al respecto. Algo que coincide con la visión positiva que algunos visionarios tienen acerca de la inmortalidad, sin faltar tampoco quienes aseguran que la inteligencia artificial jugará un papel fundamental en aquello de no morirse.
¿Será posible que la primera persona inmortal ya haya nacido? Aunque por ahora suene prácticamente a ciencia ficción, algunos no lo descartan. Y descubrimientos como este avivan la llama de la esperanza.
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Etiquetas: Salud, Curiosidades
