¿Llevas diez años en el mismo trabajo y te mueres del asco? ¿Desde hace una década tu vida parece estar estancada sin nada nuevo o excitante? Debes saber que el escritor y experto en ‘felicidad’, Arthur Brooks, aboga por cambiar de trabajo cada década. Y predica con el ejemplo, pues ahora está en Harvard, pero también fue músico, obtuvo un doctorado en economía o fue director de la organización sin fines de lucro American Enterprise Institute, entre otras.
A partir de ahí, tras escribir algunos libros de divulgación, se ha convertido en profesor de Harvard y gurú de la felicidad. Y no es el único. Según informa ‘Psychology Today‘, el médico-investigador David Sackett, famoso como uno de los fundadores del movimiento “Medicina basada en la evidencia” en las décadas de 1970 y 1980, creía que una vez que te convertías en un experto en algo, debías dejarlo.
Los expertos a menudo retrasan el progreso porque generalmente han producido sus nuevas ideas mucho antes de ser aceptados, y después de convertirse en expertos, pasan el resto de sus vidas defendiendo sus ideas anteriores
Sus razones incluían el hecho de que los expertos a menudo retrasan el progreso porque generalmente han producido sus nuevas ideas mucho antes de ser aceptados como expertos, y después de convertirse en expertos, pasan el resto de sus vidas defendiendo sus ideas anteriores. Los expertos no tienden a ayudar a los campos a progresar; los más jóvenes, que aún no son expertos, aportan nuevas ideas. Y luego se convierten en expertos, y evitan un mayor progreso.
Parece bastante coherente eso de no dormirse en los laureles en la vida. También argumentó que una vez que dominas un campo debes pasar a otro que pudiera ser más importante (y él también predicó con el ejemplo). En definitiva, para todo hay un tiempo, citando al Eclesiastés. Hay un tiempo para ser un experto en esto; y un tiempo para ser experto en otra cosa. No necesitas ser experto en lo mismo para siempre. De hecho, nunca sabrás si la próxima gran cosa podría suceder a menos que dejes de hacer la última gran cosa.
Por ello quizá sea bueno eso de renovarse o morir y lo ideal sería, según ciertos expertos además de los ya mencionados, cambiar lo que haces o cómo vives cada diez años. No tiene por qué ser una década exacta, si las cosas van mal, haz un cambio en cinco años. Si las cosas van bien, puedes alargarlas durante 15 años. Pero cambia, pues un éxito inicial puede impedir un éxito posterior.
No tiene por qué ser una década exacta, si las cosas van mal, haz un cambio en cinco años. Si las cosas van bien, puedes alargarlas durante 15 años
De hecho, no importa si tienes éxito o fracasas, debes planear hacer un cambio cada década más o menos. Con demasiada frecuencia, pensamos que debemos hacer un cambio solo si las cosas no van bien, si estamos fallando de alguna manera. Pero de lo que no nos damos cuenta es que debemos hacer cambios incluso cuando tenemos éxito. El problema es que el fracaso tiende a verse como una buena razón para hacer un cambio, pero la gente pensará que hay algo raro si quieres hacer un cambio debido al éxito o a pesar de él.
Por supuesto, si tienes éxito con algo que ha estado haciendo durante una década o dos, puedes seguir haciéndolo si te da seguridad y es todo lo que quieres. Pero hay buenas razones para pensar lo contrario si estás dispuesto a correr un poco de riesgo.
¿Llevas diez años en el mismo trabajo y te mueres del asco? ¿Desde hace una década tu vida parece estar estancada sin nada nuevo o excitante? Debes saber que el escritor y experto en ‘felicidad’, Arthur Brooks, aboga por cambiar de trabajo cada década. Y predica con el ejemplo, pues ahora está en Harvard, pero también fue músico, obtuvo un doctorado en economía o fue director de la organización sin fines de lucro American Enterprise Institute, entre otras.