Microsoft ha iniciado la cuenta atrás para el fin de soporte de Windows 10 el próximo 14 de octubre. Los ordenadores más antiguos dejarán de ser compatibles con el soporte de actualizaciones de los de Redmond, aunque aseguran que esto no supone el abandono definitivo.
Los usuarios empiezan a buscar alternativas, entre ellas dar el salto a Linux, que superó el 5% de usuarios en Estados Unidos a finales de julio. Los dispositivos que son compatibles con la última versión de Windows 11 optan por actualizar el PC, pero el ecosistema de Microsoft ha dividido a los clientes.
Dentro de este contexto tan cambiante, un sistema operativo que el gigante tecnológico ha lanzado hace 16 años ha crecido hasta un 100% en solo dos meses: Windows 7.
Windows 7 crece 16 años después de salir al mercado
Microsoft esperaba que las descargas de Windows 11 se disparasen en las últimas semanas del fin de soporte de Windows 10. La realidad es que el número de usuarios ha aumentado progresivamente, aunque no al ritmo que les gustaría a los de Redmond, incluso despuntan otras alternativas que se creían olvidadas.
La cuota de mercado de Windows 10 rozaba el 60% en octubre de 2024 frente a unas cifras discretas de Windows 11 con un 35% para el mismo periodo, según los datos de StatCounter. La implantación ha ido creciendo en los últimos meses hasta superar a la versión antigua a inicios de julio de este año.
Las cifras suben hasta el 50,74% para Windows 11 en septiembre de este año, frente al 43,09% de Windows 10. Estas son buenas noticias para Microsoft, pero no esperaban que Windows 7 creciese hasta un 100% con décadas de antigüedad.
Windows 7, lanzado en 2009, está creciendo entre los usuarios tras mantenerse sin demasiados cambios durante más de una década. La cuota de uso ha aumentado del 2,02% en julio al 3,59% en agosto, aunque sigue creciendo en septiembre hasta llegar al 5,2%.
Un sistema operativo que crece más de un 100%
La implantación de Windows 7 no es un caso aislado, se ha repetido con un aumento sostenido durante dos meses consecutivos. Los datos de StatCounter demuestran que las descargas de este sistema operativo han crecido más de un 100% en comparación con las cifras de julio.
El 5,2% de Windows 7 sigue siendo una cifra pequeña en comparación con el número de usuarios de Windows 11 y 10, pero llega en el momento más delicado para Microsoft. Millones de usuarios se niegan a actualizar a la última versión del sistema operativo, aunque esto no significa que estén cambiando sus PC con una versión anterior.
Aún es pronto para asegurar que pueda ser una amenaza para Windows 11, aunque las cifras son impresionantes para una versión que finalizó su soporte en enero de 2020. Esto podría tratarse de un aumento puntual que no continuará en el largo plazo como ha ocurrido en julio y agosto con Windows 8, que en septiembre cae a sus valores habituales.
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Etiquetas: Microsoft, Windows 11, Windows 10
