2024 está siendo un año nefasto para Boeing. Y aún no ha acabado… Este fin de semana un satélite fabricado por la compañía, el Intelsat 33a, ha explotado en el espacio, diseminando docenas de fragmentos de peligrosa basura espacial.
El satélite Intelsat 33a de Boeing llevaba en órbita desde hace ocho años, y su ciclo de vida era de 15 años. Apenas había cumplido la mitad.
No es el primer satélite de Boeing que se pierde. El Intelsat 29a sufrió un incidente similar, tras tres años orbitando la Tierra.
Cuando un satélite explota, lo peor viene después
Boeing está acumulando numerosos fracasos y polémicas, en lo que llevamos de 2024. Dentro de la Tierra, se enfrenta a un complicado juicio, por los accidentes de varios aviones Boeing 737 Max.
Fuera de ella, su primera misión de transporte de astronautas a la Estación Espacial Internacional, con su cápsula Starliner, ha sido otro fiasco, ya que los astronautas se han tenido que quedar allí, debido a fallos en la Starliner. Fueron para unos días, y van a pasar un año en la estación.
A todo ello se suma el incidente del satélite. Según el parte de la Fuerza Espacial estadounidense, vía Jalopnik, el pasado 19 de octubre se detectó la explosión del satélite Intelsat 33e. El lunes se confirmó su total destrucción.
El satélite de comunicaciones Intelsat 33a se lanzó en 2016, y ya en su lanzamiento tuvo problemas con el propulsor, lo que le hizo alcanzar la órbita más tarde de lo previsto.
En 2017, otro problema no especificado hizo que Boeing redujese su ciclo de vida de 15 a 11,5 años. Todo apunta a que el accidente del pasado fin de semana tiene que ver con algún fallo de la mencionada propulsión.
Lo peor de todo es que la explosión ha generado abundante basura espacial que podría chocar con otros satélites, y destruirlos.
Según la propia Intelsat, se han observado 20 trozos del satélite. Sin embargo, la empresa independiente ExoAnalytic Solutions ha detectado al menos 57 trozos de basura espacial.
Para Boeing, esta explosión de su satélite, más allá de las pérdidas económicas, es una nueva pérdida de reputación. Lo mejor que le puede pasar es que termine ya 2024, para mirar con nuevas perspectivas el nuevo año.
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Etiquetas: NASA, Curiosidades
