Reducir las emisiones es fundamental para limitar el aumento de la temperatura media mundial. El cambio climático está trayendo tormentas y sequías más severas, dañando la biodiversidad y elevando el nivel del mar.
La industria tecnológica es responsable de una cantidad relevante de las emisiones globales totales de carbono del mundo. Actualmente, la huella de carbono de este sector oscila entre el 5% y el 10% de todas las emisiones de gases de efecto invernadero en todo el mundo.
Para que te hagas una ligera idea, eso es más que las emisiones del transporte aéreo, aunque el impacto de los aviones parece estar recibiendo mucha más atención que la tecnología en estos días.
Aunque esta industria no se encuentra entre los peores culpables de las emisiones de gases de efecto invernadero —ya que este puesto lo ostentan los sectores del petróleo, del gas y la electricidad—, tienen la doble responsabilidad de no solo mitigar su propia huella, sino también ayudar al mundo a lograr la neutralidad de carbono a través de sus productos, servicios y modelos de negocios.
Reducir su huella de carbono: el nuevo reto de las grandes empresas tecnológicas que crece tras la pandemia
“Hay grandes retos y compromisos medioambientales a nivel global, acompañados de inversiones millonarias y existe una gran necesidad de dar una imagen de responsabilidad social por parte de las tecnológicas, pero todo se ha visto incrementado tras la pandemia”, explica para Computer Hoy Rodrigo Ramírez, doctor Summa cum laude en Ingeniería Eléctrica y especialista en gestión energética.
Las grandes empresas de tecnología también se enfrentan en la actualidad a un arma de doble filo cuando se trata de gestionar el cambio climático.
Cuantos más dispositivos y servicios vendan, si bien es bueno para el negocio, también generan más emisiones de gases de efecto invernadero por el uso de más electricidad para crear y hacer funcionar los dispositivos y de quema más combustible fósil para su transporte.
Para contextualizar la situación, explicar que la neutralidad en carbono o carbono neutral se refiere al balance de emisiones de gases de efecto invernadero. Cuando una empresa produce dióxido de carbono puede compensarse mediante otro métodos.
Muchas compañías tecnológicas como Apple, Samsung o LG se están moviendo hacia la energía renovable, pero las relaciones comerciales pueden agregar un incentivo más fuerte. Por ejemplo, Intel clasifica las emisiones de gases de efecto invernadero de sus proveedores como un factor para hacer negocios con ellos.
Ahora bien, algunos pueden llegar a pensar que mucho de lo que las empresas promocionan como prácticas sostenibles o reducción de la huella de carbono se queda en simples acciones de marketing.
Según un informe de 2022 del Corporate Climate Responsibility Monitor, los objetivos de “cero neto” de 25 empresas importantes dieron como resultado solo una reducción general del 40% en las emisiones de esas empresas y no del 100%. Veamos cómo algunas de las grandes compañías de tecnología del mundo aportan su granito de arena.
Propuestas de las grandes marcas para un futuro sostenible
Entre las grandes apuestas de las tecnológicas por un futuro sostenible destacan programas como los de Apple, Samsung, HP, Microsoft, Google y LG.
Apple
Después de que Apple hizo que sus propias operaciones fueran neutras en carbono en 2020 para combatir la liberación de emisiones de gases de efecto invernadero, los proveedores de la empresa ahora van en la misma dirección, afirman. Un total de 213 de ellos en 25 países se han comprometido a impulsar su producción de componentes de Apple con energía renovable.
Apple estima que los usuarios de los productos de Apple representan el 22% de la huella de carbono total. Pretende ser neutrales en carbono para los Alcances 1, 2 y 3 para 2030. Para ese plazo, también planea reducir las emisiones de otros gases de efecto invernadero como el metano y el óxido nitroso.
“A medida que Apple sigue progresando en la reducción de las emisiones en un 75% para 2030, la empresa prioriza las soluciones de alta calidad basadas en la naturaleza para el 25% de las emisiones restantes que son inevitables con las tecnologías existentes”, explican en su blog.
Samsung
Presentado originalmente en 2021, Galaxy for the Planet es el nombre de la plataforma de sostenibilidad de Samsung. Este conjunto de objetivos ambiciosos apunta a reducir la huella ambiental de la compañía en cada parte del negocio, desde la producción y el embalaje hasta el transporte e incluso el uso de energía de sus lugares de trabajo y oficinas.
Esto es algo que parece haber tomado en serio con la nueva serie Galaxy S23, su línea de móviles más sostenibles hasta el momento. Tal y como explican, consta de más materiales reciclados que cualquier generación anterior de móviles Galaxy.
El aluminio y el plástico reciclado del océano forman parte de la construcción de los dispositivos, mientras que la pantalla duradera Corning Gorilla Glass Victus 2 contiene un promedio de 22% de vidrio sostenible. Incluso el embalaje exterior está hecho de papel 100% reciclado.
“Estamos priorizando la tecnología de bajo consumo, que aumenta la eficiencia energética. La compañía ha conseguido reducir el consumo de energía en espera en todos los cargadores de smartphones a 0,02 W, lo que supone una de las mayores eficiencias energéticas del sector móvil, con el objetivo de reducirlo a menos de 0,005 W para 2025”, explican.
Microsoft y HP
Por otro lado, grandes compañías tecnológicas y se servicios como Microsoft o HP están contratando expertos en sustentabilidad (gestionan de forma sostenible los recursos de una empresa), un movimiento que está creciendo en la industria.
Microsoft, por ejemplo, implementó una táctica interesante para alentar a sus líderes a reducir la huella de carbono de su división o unidad. El gigante del software implementa un impuesto interno al carbono en la división si excede el nivel de emisiones asignado y ese dinero del “impuesto” se destina al laboratorio de investigación y desarrollo de sostenibilidad de la empresa.
Para HP, por otro lado, la mayoría de sus emisiones de gases de efecto invernadero están relacionadas con la electricidad que utiliza para alimentar sus instalaciones. Como resultado, el fabricante de hardware está reduciendo bruscamente su consumo de energía, buscando formas de aumentar su energía renovable en sus instalaciones y adquiriéndola.
Google no solo apuesta por cambiar la empresa a nivel de ecología de forma individual, sino también quiere que sus usuarios sean más sostenibles. Prueba de ello son sus rutas ecológicas, que muestran una pequeña hoja de ruta junto a las direcciones de Google Maps con la huella de carbono más baja. Con esto afirma haber conseguido reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en más de 500.000 toneladas métricas (el equivalente a sacar de la carretera 100.000 coches).
Los esfuerzos de sostenibilidad de Google abarcan algunas más de sus ofertas, que van desde el aprendizaje automático para ayudar a enfriar sus centros de datos hasta termostatos inteligentes que conservan la energía del hogar.
Esta es solo una de las muchas iniciativas que la marcaha lanzado para ayudar a otros a lograr una descarbonización mientras trabaja para lograr su propio objetivo de emisiones netas cero en 2030.
LG
LG anunció su iniciativa ‘Zero Carbon’ 2030 en 2019, comprometiéndose a reducir la cantidad total de emisiones de carbono directas e indirectas generadas durante el proceso de producción en un 50% en comparación con la línea base de 2017.
“Las actividades actuales de LG están en línea con nuestra estrategia ESG a medio y largo plazo para producir productos y servicios ecológicos para las generaciones futuras”, ha señalado recientemente Kim Joon-ho, vicepresidente ejecutivo y director del Centro de Gestión de Calidad de LG Electronics. “LG trabaja en soluciones medioambientales centradas en los temas de cero neto y economía circular”, añade.
De hecho, en España son de las divisiones más ecologistas. Prueba de ello es que tienen su proyecto Smart Green, que busca plantar 47 millones de árboles cada año, y Smart Bees, que protege el ecosistema de la abeja ibérica, entre otras iniciativas.
¿La neutralidad de carbono y las emisiones netas cero serán una realidad algún día?
Para la industria de la tecnología se cree que el 90% del sector habrá establecido sus propias metas de carbono neutral y cero emisiones netas para 2040. Pero, ¿lograrán estos objetivos?
“Siendo optimistas, esperamos que se produzcan cambios a nivel corporativo que realmente repercutan en la sostenibilidad de nuestra sociedad”, explica el Dr. Ramírez. “Sin embargo, la realidad es que va a ser muy difícil o casi imposible llegar a los compromisos medioambientales (por el momento) debido, entre otros aspectos, a los problemas económicos y la actual guerra en Ucrania“, añade.
Desde luego, para hacer avanzar en el proceso con mayor velocidad, las empresas tecnológicas deben pensar más allá de sus propias operaciones y las de la industria y colaborar con otros sectores para lograr la neutralidad de carbono y las emisiones netas cero.
“Los cambios profundos requieren inversiones profundas y no se si esas grandes compañías están dispuestas por el momento“, finaliza el Dr. Ramírez.
Las metas antes mencionadas seguramente se cumplirán, pero la sociedad y nuestro planeta necesita grandes cambios si se quiere hablar de reducción de huella de carbono y sostenibilidad. Los expertos esperan que estos pequeños pasos sean solo el comienzo.