El 22 de noviembre de 1916, el sacerdote Miguel Fuente descubrió una piedra única de República Dominicana: el larimar. Según los estudios científicos, la Hispaniola se formó a través de erupciones volcánicas hace 100 millones de años aproximadamente.
De esta forma, se creó una montaña en la sierra de Bahoruco, el lugar donde se extrae el larimar. Desde su descubrimiento, la comercialización de esta piedra azul se ha ido extendiendo hasta convertirse en un símbolo de la cultura dominicana.
Con esto, miles de dominicanos se han dedicado a comprarlo y venderlo a lo largo de los años. En la Ciudad Colonial, el larimar se ofrece a los visitantes y turistas. Este oficio, que nació a gracias a un descubrimiento, se mantiene vivo en las calles de Santo Domingo.