Por el Lic. Roberto Canaán
La expansión de la demanda anual de energía en un país con luz eléctrica debería ser más de un 12%. En nuestro país no llega ni a 8% debido a los apagones. Gran parte de la energía se pierde en el recorrido por las redes de distribución, especialmente cuando las líneas son viejas y de poca capacidad como es el caso nuestro.
Precisamente, la privatización de la CDE se hizo con el objetivo de reducir las pérdidas en las redes de distribución y eficientizar el sistema. Los contratos de privatización estipulaban, un pago por la compra de los activos propiedad de la CDE, es decir, las oficinas comerciales, las centrales eléctricas y toda la inversión requerida para atender la expansión de la demanda de un 12% anual.
Una cosa era un pago en efectivo por los activos recibidos y otra cosa era la inversión cada año, para cubrir la expansión del 12% de la demanda. Nada de eso se cumplió. La energía se privatizó y el negocio quedó conformado por una tríada: 1. -Distribuidoras, 2. -Generadores y 3. -CDE-Gobierno.
VEAMOS ENTONCES LO QUE PASÓ.
1. Las empresas distribuidoras de energía debieron invertir prioritariamente en subestaciones, trasformadores, nuevas líneas de distribución, para evitar las perdidas en el sistema. Las inversiones debieron hacerse siguiendo un calendario, el cual nunca fue presentado. Lo peor es que, no pagaron nada por los activos recibidos de parte de la CDE.
2. Los generadores privados, muchos con contratos privados de compra de energía (IPP’s) firmados a precios altos con el Estado Dominicano, nunca les entusiasmó la idea de hacer transformaciones importantes para reducir el costo de su generación, pues el Estado le pagaba a mas US$0.14 centavos el kw/hr.
3. LOS BENEFICIOS DE LOS GENERADORES FUERON ENORMES.
Por ejemplo, por cada centavo de dólar ($0.01) por encima del costo de producción, el beneficio es de US$1,000 por cada planta de 100 MW, es decir US$24,000 dólares al día. En 1,000 MW serian US$240,000 diarios. Si los benéficios fueran US$0.05 por kw/hr en vez de $0.01 Kw., entonces serían US$1.2 millones de dólares diarios. En 365 días, serían más de $400 millones de dólares al año. Pero además de las enormes ganancias en la generación, hay otros beneficios ocultos. Por ejemplo, anteriormente gran parte de la energía se generaba con gasoil, como si fuéramos una nación rica en petróleo. Algunos generadores han cambiado a combustibles más baratos que el gasoil, tales como gas natural y carbón que deben ser importados desde Trinidad y el carbn desde la mina de Cerrejón en Colombia. Antes todos cobraban la tarifa como si todavía estuvieran generando sobre la base del precio del gasoil. Por suerte esta funcionado el mercado spot en el cual los generadores entran al sistema por orden de mérito, es decir los que generan el kw más barato entran a la red interconectada primero.
4. La CDE- Gobierno que es la tercera de la tríada, se quedó con las líneas de transmisión y las hidroeléctricas. Esta es la única empresa de las tres que ha construido nuevas líneas de transmisión, subestaciones e hidroeléctricas.
LA COMISIÓN DE ENERGÍA DEBE VERIFICAR LOS CONTRATOS PRIVADOS DE ENERGÍA CON IPP, SI ES QUE TODAVÍA EXISTEN, Y TOMAR EN CUENTA LO SIGUIENTE:
1. Todos los contratos deben pasar al mercado spot. Hay que eliminar la práctica fraudulenta de pagar la energía a los generadores con IPP’s (si es que todavía existen), sobre la base del precio del contrato más caro, pues sería inútil que se renegocien a menor precio el kw/hr, pues la tarifa aplicada, es el precio del contrato más caro.
2. El sobreprecio de la tarifa abusiva es tan grande como el servicio de la deuda externa, millones de dólares al ano.)
3. A la nación le están dando un”tumbe” mensual de millones de dólares, que no entran al PIB. Ya han sacado del país en ultiims 20 años más de US$24,000 millones de dólares, con las tarifas abusivas y los trucos en la facturación. Esta fuga de divisas es un crimen y mata nuestra economía. Finalmente, si los generadores se niegan y la renegociación fracasa, entonces el gobierno puede devolver el negocio para atrás y negociar de nuevo con otros privatizadores, en mejores condiciones.
EN LA ACTUALIDAD : LOS SUPLIDORES DE MATERIALES ELECTRICOS
Las distribuidoras de energía deberían auditar los materiales que le compran a los suplidores eléctricos, pues muchas veces son equipos usados y de mala calidad que no cumplen con los estándares de calidad internacionales.
También las autoridades deben exigir la certificación internacional de todos los suplidores de materiales eléctricos y erradicar la práctica fraudulenta de usar ficha técnica falsa con el propósito de entregar otra calidad de material diferente al de la licitación. Y cuando se rechace algún material que no cumpla con las normas, este debe ser confiscado para evitar que lo reciclen y lo vendan a las EDES a través de otro suplidor.