Si piensas que tus datos personales están a salvo en Internet, es probable que estés equivocado. De acuerdo con un reporte publicado por Safeonweb, recientemente se han filtrado más de 200 millones de contraseñas que actualmente circulan libremente en la red, poniendo en riesgo a muchos usuarios.
Estas credenciales se comparten abiertamente en foros especializados, plataformas ilegales e incluso en apps de mensajería, como Telegram, exponiéndote a amenazas que quizás no imaginas. Esta situación significa un riesgo enorme para tu seguridad personal.
Si habitualmente utilizas una misma contraseña para múltiples servicios, podrías estar facilitando involuntariamente el acceso a datos sensibles almacenados en tu correo electrónico, perfiles de redes sociales, cuentas bancarias y todo tipo de servicios digitales.
¿Qué sucede si tu contraseña cae en manos equivocadas?
Que tus credenciales personales, especialmente tu correo electrónico y contraseña, circulen de forma abierta en la red supone graves riesgos para tu privacidad y seguridad.
Cuando un ciberdelincuente accede a tu contraseña, puede obtener acceso inmediato a todos los servicios que utilizas habitualmente: tu aplicación del banco, redes sociales, plataformas de streaming, tiendas online e incluso aplicaciones donde almacenas información personal sensible, como fotografías, documentos privados o detalles bancarios.
Si esto ocurre, los atacantes pueden no solo robar tu información personal, sino también usarla para chantajearte, suplantar tu identidad o utilizar tus datos personales para cometer fraudes, entre otras técnicas. Incluso podrían perjudicarte profesionalmente al obtener acceso a correos corporativos o información confidencial de trabajo.
Es por ello que los expertos en ciberseguridad recomiendan actuar inmediatamente. La organización belga de seguridad digital Safeonweb ha advertido a todos los usuarios de la importancia de comprobar cuanto antes si sus datos personales están incluidos en esta reciente filtración.
Have I Been Pwned
Para ello, puedes recurrir a herramientas gratuitas como Have I Been Pwned, una página web que te permite introducir tu dirección de correo electrónico para verificar rápidamente si tus datos personales están afectados y están circulando en la dark web.
Si tras realizar esta comprobación descubres que tus datos han sido expuestos en una filtración, debes actuar inmediatamente:
Cambia inmediatamente todas tus contraseñas: El primer paso es crear contraseñas nuevas, robustas y únicas para cada una de tus cuentas. Evita usar palabras comunes o combinaciones fáciles. Lo recomendable es utilizar una secuencia larga con letras mayúsculas, minúsculas, números y símbolos para aumentar su dificultad y resistencia a futuros ciberataques.
Activa la verificación en dos pasos (2FA): Este método añade una capa adicional de seguridad, ya que, además de introducir la contraseña, deberás validar el acceso mediante un código enviado a tu móvil o mediante aplicaciones como Google Authenticator o Microsoft Authenticator. Esto reduce significativamente las posibilidades de acceso no autorizado a tus cuentas.
Limita al máximo la información personal que compartes en Internet: Antes de registrarte en cualquier plataforma o servicio web, pregúntate si realmente necesitas compartir datos como tu dirección, número telefónico o detalles bancarios. Recuerda que cuanto menos compartas en la red, menor será la posibilidad de que tus datos acaben filtrados o en manos de ciberdelincuentes.
Monitorea regularmente la actividad en tus cuentas: si alguna de tus redes sociales contiene información bancaria o personal sensible, esto te ayudará a detectar cualquier actividad sospechosa o intento de acceso no autorizado, permitiéndote actuar rápidamente en caso necesario.
Utiliza un gestor de contraseñas: Herramientas como LastPass, 1Password o Dashlane te permiten almacenar todas tus contraseñas de forma cifrada y generar automáticamente combinaciones. Así, solo necesitarás recordar una única clave principal, lo que simplifica tu vida y reduce significativamente el riesgo de sufrir nuevas filtraciones o pérdidas de datos.
No compartas tus contraseñas con nadie: Aunque pueda parecer seguro compartirlas con familiares o amigos, al hacerlo multiplicas las probabilidades de que esta información acabe en manos equivocadas.
En caso de que también hayas olvidado la contraseña o no puedas acceder para realizar estos ajustes, ponte en contacto de inmediato con el soporte técnico del servicio afectado para restablecer tu acceso mediante la recuperación segura de tu cuenta.
Los expertos aconsejan tener cuidado con los correos electrónicos y mensajes sospechosos, por lo que no debes hacer clic en enlaces ni descargar archivos adjuntos de remitentes desconocidos. Estos mensajes pueden contener malware o enlaces a webs de phishing que intentan robar tus datos. Es importante mantener seguros tus datos, por ello, debes seguir las recomendaciones.
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Etiquetas: Privacidad, seguridad
