Los magnates Elon Musk y Donald Trump se han dicho cosas demasiado fuertes. El primero acusó al segundo de estar en la lista de un pederasta, y el Presidente de Estados Unidos amenazó con deportar al dueño de X a Sudáfrica, y aplicarle el DOGE, el departamento de recortes que Elon dirigió. La reconciliación es posible, porque a ambos les interesa, pero de momento está lejos.
Una investigación de The Wall Street Journal ha sacado a la luz que, tras su ruptura, Trump pidió revisar los contratos gubernamentales de SpaceX para anularlos, pero se dio cuenta de que la mayoría eran vitales: no hay empresas alternativas.
Es una confirmación de lo que ya dijo el Presidente de Estados Unidos en público, que iba a revisar todos los contratos con Musk.
Elon Musk evita el acercamiento con Trump
Para responder a esta información, Donald Trump ha dicho hoy en su red social lo siguiente:
“Todo el mundo afirma que voy a destruir las empresas de Elon quitándole algunas, si no todas, las subvenciones a gran escala que recibe del Gobierno de los Estados Unidos. ¡No es así! Quiero que Elon y todas las empresas de nuestro país, PROSPEREN, de hecho, ¡PROSPEREN como nunca antes!”.
Muchos han querido ver en este mensaje una rama de olivo hacia el fundador de SpaceX. Otros, una forma de exculparse si Tesla entra en bancarrota, viendo la brutal caída en ventas de los últimos seis meses.
Para Elon Musk, de rama de olivo, nada de nada. Le sigue molestando mucho que el Presidente de Estados Unidos hable de subsidios (subvenciones), cuando los contratos con SpaceX se los ha ganado superando concursos con la competencia. Y con Tesla, Trump ha eliminado todas las ayudas.
Esto es lo que ha respondido el dueño de X: “Los “subsidios” de los que habla simplemente no existen. Ya ha eliminado o puesto fecha de vencimiento a todo el apoyo a la energía sostenible, mientras que dejó intactos los subsidios masivos al petróleo y al gas”.
Y continúa: “SpaceX ganó los contratos de la NASA haciendo un mejor trabajo por menos dinero. Trasladar esos contratos a otras compañías aeroespaciales dejaría a los astronautas varados y a los contribuyentes con el doble de gasto”.
Lo que sorprende es que Elon se queje de que Trump ha eliminado todas las subvenciones a las energías verdes y el coche eléctrico, mientras mantiene miles de millones de dólares de ayudas para el petróleo y el gas. Es justo lo que dijo que haría antes de que Musk le apoyase.
La respuesta de Elon Musk a Donald Trump no ha sido muy amistosa. Una lástima que se haya dado cuenta de lo que el Presidente de Estados Unidos representa, cuando ya está en el cargo.
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