El sector asegurador en América Latina se encuentra en una situación difícil, ya que menos del 20% de la población está asegurada, una cifra muy baja si se compara con el 38% del ámbito mundial. República Dominicana no escapa a ese indicador, ya que, en el ámbito local, la contratación de cobertura también es limitada.
Así lo indicó Claudia Vélez, secretaria general de la Federación Interamericana de Empresas de Seguros (Fides), durante su participación en el panel “Visión Iberoamericana del Seguro en 2025”, celebrado en el “Congreso Cadoar 2025”, organizado por la Cámara Dominicana de Aseguradores y Reaseguradores (Cadoar) en Santo Domingo.
“La región necesita fortalecer la cobertura de seguros, aumentar la resiliencia ante desastres naturales y fomentar la inclusión para disminuir la vulnerabilidad de la población”, enfatizó Vélez, en el evento que contó con la participación del superintendente de Seguros, Julio César Valentín, quien reveló que, al cierre de 2024, República Dominicana había experimentado un crecimiento en la penetración del seguro del 1.8%, aún insuficiente.
Vélez añadió que en República Dominicana el índice de penetración se sitúa en un 1.7%, muy por debajo del promedio latinoamericano que es del 3.1%. “La penetración de seguros en América Latina es relativamente baja, con un promedio del 3% del producto interno bruto (PIB), contrastando con el 7.1% a nivel global”, explicó.
Indicó que este panorama muestra un mercado potencial significativo para el crecimiento del sector asegurador en la región. No obstante, Vélez advirtió que, tanto a nivel regional como global, el sector enfrenta varios desafíos: regulación compleja, inteligencia artificial (IA), efectos del cambio climático y competitividad.
Respecto a la regulación, indicó que las crecientes complejidades y diversidades de normas locales e internacionales obligan a las aseguradoras a adaptarse constantemente para cumplir con los requisitos legales y de supervisión.
En cuanto al cambio climático, Vélez destacó que los fenómenos naturales extremos están aumentando tanto en frecuencia como en severidad, incrementando los riesgos asegurables y la siniestralidad, lo cual presiona la sostenibilidad técnica de productos como los seguros de propiedad y agrícolas.
Además, mencionó que la incorporación de la inteligencia artificial transforma procesos cruciales como suscripción, detección de fraude y servicio al cliente; sin embargo, también plantea retos éticos y regulatorios significativos junto con preocupaciones sobre ciberseguridad. Por último, subrayó cómo la llegada de nuevos actores tecnológicos está redefiniendo el panorama competitivo del sector.