Los operativos que realiza la Dirección Nacional de Migración en el distrito municipal de Verón-Punta Cana “no se están sintiendo”, según informó a Diario Libre Ramón Ramírez, director distrital de la zona.
Ramírez reconoció que al principio se observaban los trabajos realizados, donde los inmigrantes evitaban circular libremente, pero actualmente “todo está normal aquí, como si no pasara nada”.
A su juicio, la situación se percibe como si el proceso hubiese sido suspendido, ya que no se observa que se estén llevando a cabo las labores migratorias.
Entre las áreas donde los operativos eran más frecuentes se encontraban las zonas de transporte, Friusa y los lugares en construcción, que son los puntos donde generalmente se observa la mayor cantidad de extranjeros laborando y transitando.
“La realidad es que en esos lugares los extranjeros siguen igual; allí hay la misma afluencia de nacionales haitianos, lo que evidencia que los trabajos se han frenado, que están momentáneamente parados”, expresó Ramírez.
El funcionario destacó que lo más importante es que estos operativos se retomen lo antes posible y se agilicen, ya que la población, cuando se estaban realizando con eficiencia, se sentía conforme con estas acciones.
“Esto es lo que quiere la gente, lo que quiere el pueblo, porque permite mejorar la eficiencia salarial, tener mayores oportunidades de empleo y mejores servicios en el ámbito de la salud”, afirmó.
En cuanto a si las deportaciones masivas estaban afectando a algunos sectores de la zona, como la construcción, Ramírez señaló que, en su opinión, no era así. “Fue todo lo contrario, ya que esto creó mucha más tranquilidad para todos los sectores”, sostuvo.
Además, indicó que muchas personas consideran que la afluencia de migrantes haitianos genera inseguridad, ya que muchos de ellos no están identificados ni tienen documentos. Incluso, afirmó que los niveles de delincuencia disminuyeron automáticamente durante los días en que se realizaban los operativos de interdicción en la zona.