Como decíamos, tu router WiFi es uno de los objetos más personales que tienes en casa. Todo el tráfico de Internet de todos los aparatos conectados en su casa pasa a través de este dispositivo y eso significa que sabe absolutamente todo sobre nosotros.
Esa es razón es más que suficiente para protegerlo de cualquier posible intruso. Proteger tu conexión principal a Internet no requiere una suscripción de seguridad de pago o una VPN. En la actualidad, es probable que tu router WiFi ya disponga de esta función de seguridad tan útil.
Por si no la conoces, se llama Modo invitado y, como su propio nombre indica, crea un SSID (identificador de conjunto de servicios) independiente de la red principal, con un nombre, una contraseña y un tráfico diferentes. Así puedes navegar por separado, sin peligros.
Los modos invitados vienen con sus propias contraseñas y configuraciones. Y son fáciles de crear, editar, destruir y reconstruir. Ve a la página de administración de tu WiFi, curiosea y encontrarás algún tipo de modo invitado en la configuración. Incluso los routers básicos tienen esta función hoy en día.
Ventajas del modo invitado de tu router
Un nombre de red y una contraseña independientes significan que no necesitas dar a los invitados los detalles de la red principal a la que solo tú y tu familia podéis acceder. Si tu modo invitado tiene controles parentales o restricciones de cualquier tipo, actívalos.
También puedes desconectar la conexión secundaria a Internet por cualquier motivo, sin que ello afecte al uso de tu red. Si necesitas asegurarte de que tu hijo no está viendo YouTube toda la noche, puedes apagar su red invitada en cualquier momento, mientras tu podrás seguir navegando sin problema.
El modo invitado también es fácil de detectar en la lista de redes y, como la red ya está restringida, puedes utilizar una contraseña fácil de escribir para que entren más cómodamente. Incluso puedes crear un código QR WiFi solo para la red de invitados. Saca todo el potencial de router WiFi, no es difícil.
