Tesla era todo un símbolo de status, pero la marca no ha dejado de perder valor desde que Elon Musk tiene influencia en la Casa Blanca de la mano de Donald Trump. Algunos propietarios que no empatizan con las ideas del CEO de la compañía incluso se avergüenzan de conducir uno de esos coches eléctricos.
El Tesla Model Y es uno de los más vendidos de la marca. Este modelo tiene una potencia de 514 CV y batería de 75 kWh que proporciona una autonomía de hasta 568 kilómetros, ha convencido a los conductores de todo el mundo, pero ahora muchos han cambiado de opinión.
La autonomía no es suficiente para un modelo de unos 60.000 euros. “Era molesto tener que detenerse para cargar el coche durante un viaje por carretera, pero nos acostumbramos a este pequeño inconveniente”, asegura Kimberly Witt a Business Insider.
Los conductores se llevan una sorpresa desagradable tras comprar el Tesla
La conductora asegura que ha terminado utilizando el Model Y para moverse por la ciudad o trayectos cortos, este Tesla no es la mejor opción para viajes largos de cientos de kilómetros. La autonomía no es el único inconveniente que ha encontrado Witt tras meses al volante de este coche eléctrico.
“Cuando vimos el precio final del seguro, pensamos que debía haber un error. Pero no, realmente iba a costar casi tanto como nuestra factura mensual del supermercado”, ha lamentado la propietaria del Tesla Model Y.
Kimberly Witt esperaba que la prima fuese elevada porque incluye dos conductores principales y dos jóvenes con poca antigüedad de carnet, pero no imaginaba que el seguro de un Tesla fuese tan elevado. Los problemas de fiabilidad a los que se enfrenta la compañía tienen parte de culpa.
Los coches eléctricos suelen ser algo más caros de asegurar que los de combustión tradicionales, pero los Tesla lideran en cuanto a precio. La conductora asegura que paga 333 dólares al mes por el Model Y, mientras que su Audi de gasolina cuesta la mitad.
Las aseguradoras no se fían de los Tesla
La marca de Elon Musk se enfrenta a una verdadera crisis que se suma a las continuas polémicas desde que se ha convertido en la mano derecha de Donald Trump. Además, algunos superventas como el Model 3 tienen fallos graves de fiabilidad con problemas en el sistema de frenado, la iluminación o los ejes. Casi una cuarta parte de los Tesla no superan la ITV.
Esto se suma al monopolio de Tesla en el mercado de los repuestos. Los conductores tendrán que llevar su vehículo a un taller oficial, lo que implica un mayor coste y enormes listas de espera: las aseguradoras tienen que asumir el precio de los alquileres de vehículos de sustitución durante ese periodo.
“Hemos tenido varias conversaciones sobre la controversia de Musk, pero al final del día nuestro bolsillo y las necesidades familiares nos han llevado a tomar la decisión de vender nuestro Tesla esta primavera”, según la conductora. Kimberly Witt asegura que está valorando comprar un híbrido enchufable.
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Etiquetas: Coche eléctrico, Tesla, Elon Musk
