El fraude financiero digital representa un desafío creciente en República Dominicana, con un impacto económico considerable que se traduce en pérdidas significativas para individuos y entidades financieras. Este fenómeno no solo incrementa los costos de prevención y recuperación, sino que también daña la reputación de las organizaciones y menoscaba la confianza en el mercado.
Joel Martínez, segundo vicepresidente de Prevención de Fraudes del Banco Múltiple Santa Cruz, habló sobre la vulnerabilidad de la población joven. Dijo que sólo el 21% de las víctimas de fraude son adultos mayores de 60 años, en tanto que los jóvenes entre 20 y 49 años son los más propensos a caer en estas estafas.
“Una encuesta realizada por el portal ’64 y más’ muestra que, sorprendentemente, sólo el 21% de las personas entre 60 y 79 años reportan haber sido víctimas de fraude”, dijo el ejecutivo. “Esto se debe a un mayor temor y precaución frente a lo tecnológico”, agregó Martínez durante su participación en el VIII Desayuno Conferencia sobre “Gestión de Fraudes: Estrategias y Perspectivas Futuras”, organizado por el Club de Gestión de Riesgos de República Dominicana (CGRRD) en el Hotel Intercontinental de Santo Domingo.
Los individuos entre 20 y 49 años, al estar inmersos en un entorno digital cotidiano, suelen carecer de los mismos temores y precauciones de los más adultos, lo que los hace más susceptibles a estos delitos.
Martínez también recordó que los bancos nunca llaman para pedir datos bancarios confidenciales como contraseñas, NIP o CVV. Si recibe una llamada o mensaje sospechoso, es probable que se trate de una estafa. No comparta información confidencial ni haga clic en enlaces sospechosos.
Un informe reciente de la Superintendencia de Bancos (SB) revela que en 2023 República Dominicana registró un aumento del 100% en los casos de fraude, con un total de 34,100 incidentes que resultaron en pérdidas netas de RD$1,677 millones.
