El crecimiento de las uñas de los pies, al igual que el de las manos, varía dependiendo de la persona y de la edad, así como de los periodos estacionales, la ingesta de calcio y de factores hereditarios. Además, este suele ser más rápido en jóvenes y empieza a disminuir la velocidad a medida que nos vamos haciendo mayores.
Por tanto, cortarnos las uñas de los pies es uno de los hábitos de higiene más comunes que realizamos en casa y que realizamos cada poco tiempo. Sin embargo, a mucha gente le surge la duda y se pregunta si lo está haciendo correctamente o si se necesita una técnica y unos pasos concretos a seguir.
Para ello, Álvaro Fernández, más conocido como Farmacéutico Fernández, un popular tiktoker que aporta consejos prácticos de salud y farmacia, nos aclara las dudas sobre los posibles riesgos de cortarnos mal las uñas en una reciente publicación en su perfil de TikTok en donde se pone como ejemplo enseñando las suyas, “que, por cierto, mira que son feas las mías”, apostilla.
Corte recto
Fernández empieza comentando que “hay mucha gente que lo hace después de bañarse porque las uñas están más blandas y es más fácil”. Sin embargo, asegura que los podólogos recomiendan no hacerlo así, porque al “estar más débiles es más fácil que se rompan o se corten de forma irregular”.
“Hay que tener especial cuidado con las esquinas, para que no se queden por debajo de la piel y que al crecer se pueden encarnar”, dice Fernández
“El corte tiene que ser más recto que en las uñas de las manos, no tan redondeado, y teniendo especial cuidado con las esquinas, que no se queden por debajo de la piel, porque entonces al crecer se pueden encarnar y eso duele a rabiar”, afirma el popular tiktoker.
Además de los consejos sobre cómo cortar las uñas de los pies, Fernández recomienda el uso de una lima tanto para las manos como para los pies, ya que esto permite suavizar y dar forma a las uñas, evitando bordes afilados o rugosidades que podrían causar molestias.
El crecimiento de las uñas de los pies, al igual que el de las manos, varía dependiendo de la persona y de la edad, así como de los periodos estacionales, la ingesta de calcio y de factores hereditarios. Además, este suele ser más rápido en jóvenes y empieza a disminuir la velocidad a medida que nos vamos haciendo mayores.
