La inglesa Chloe Kelly anotó el penalti de la victoria para definir la primera Finalissima femenina después de un dramático partido contra Brasil, visto por 83.132 aficionados en Wembley, que terminó con una victoria por 4-2 en la tanda de penales para las anfitrionas el jueves.
Ella Toone parecía haber asegurado la victoria de Inglaterra en un partido entre los campeones de Europa y Sudamérica. Su gol en el minuto 23 fue el único gol del juego antes del tercer minuto del tiempo de descuento de la segunda mitad.
Pero Andressa Alves aprovechó un error de la guardameta inglesa Mary Earps para poner el 1-1 y forzar la tanda de penales, donde Georgia Stanway, Rachel Daly, Alex Greenwood y Kelly —quien anotó el gol en Wembley que convirtió a las Lionesses en campeonas de Europa el verano pasado— anotaron el trabajo hecho para Inglaterra.
El equipo de la entrenadora Sarina Wiegman ahora está invicto en 30 partidos, y buscará extender esa racha cuando reciba a Australia en el amistoso previo a la Copa del Mundo de la próxima semana.
Inglaterra dominó la primera mitad, y Brasil la segunda, con el equipo local adelantándose con un estilo impresionante después de que Lucy Bronze intercambió pases con Stanway antes de cortar a Toone, quien no se equivocó al superar a la portera de Brasil, Leticia.
Inglaterra pensó que se había adelantado 2-0 gracias a un gol confiado de Lauren James, pero hubo un fuera de juego en la preparación.
Brasil lució como el mejor equipo después del reinicio, Geyse llamó rápidamente a Earps a la acción antes de que Kerolin rebotara un esfuerzo en dirección a la portera de Inglaterra, mientras que el despeje de Leah Williamson detuvo una oleada sostenida de los visitantes.
Geyse volvió a amenazar, esta vez disparando un cohete que Earps logró desviar.
Si bien Earps pudo detener un intento inicial de la suplente Adriana, falló el balón y el balón aterrizó en los pies de Andressa, quien no se equivocó al disparar el empate.
El partido, que tuvo un homenaje al difunto Pelé en el inicio, se fue directo a los penaltis donde Tamires y el capitán de Brasil, Rafaelle, que pegó en el larguero, no lograron marcar para los visitantes.
