Ciudad de Panamá, 14 may (EFE).- El uso de pagos digitales registró un crecimiento elevado en Centroamérica y República Dominicana entre el 2017 y el 2021, cuando se duplicó el número de dueños de cuentas de dinero móvil, y se espera que la tendencia continúe apoyada en la promoción de más regulación para fomentar el sector, dijo a EFE el economista del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) Arnoldo López.
El informe del BID «Hacia una mayor inclusión financiera para el desarrollo», reveló que los propietarios de cuentas de dinero móvil se duplicaron entre el 2017 y el 2021 al pasar del 4 % al 8 %, lo que representa un avance en inclusión financiera de empresas y hogares en la región y una puerta de entrada a otros productos y servicios financieros, con una menor dependencia de la infraestructura bancaria tradicional.
Las causas del auge
El economista regional para Centroamérica del BID dijo en una entrevista con EFE que entre las razones que impulsaron el aumento «a estas tasas tan elevadas» destaca el «apoyo regulatorio para fomentar la entrada» al mercado de «empresas no bancarias pero que proveen servicios financieros, todo este nuevo esquema fintech, aprovechado todo este desarrollo de las nuevas tecnologías».
También fue clave la pandemia de la covid-19, ya que las restricciones de movilidad impuestas entonces «fomentaron la necesidad de los medios de pago a distancia».
«Hay datos de que cerca del 40 % de la población que empezó a usar pagos electrónicos lo hizo por primera vez durante la pandemia, entonces ese es un elemento muy importante», y que se vincula con otra causa para el auge del sector, como lo es el hecho de que «los gobiernos comenzaron a fomentar las transferencias de apoyo sociales a través de medios digitales», una práctica que se ha adoptado definitivamente en varios países.
A juicio de López, tras «haber explorado cómo fue todo este avance de la inclusión financiera a través de medios digitales (…) la tendencia va a seguir creciendo, básicamente porque hay apetito, un interés del Estado por seguir apoyando la entrada de nuevos entrantes (empresas fintech)».
Los retos
El multilateral indicó en un comentario sobre el estudio «Hacia una mayor inclusión financiera para el desarrollo» que, pese a los avances, Centroamérica y República Dominicana enfrentan «desafíos para cerrar brechas con otras partes del mundo en términos de adopción de herramientas financieras digitales, así como en otras políticas que influyen positivamente en la inclusión financiera».
Entre estos retos están «el desarrollo de una estrategia nacional de inclusión financiera, la educación financiera, el impulso a la competencia, el acceso a la información crediticia de los deudores, y la eficiencia administrativa de las instituciones financieras mediante el uso de corresponsales y las plataformas digitales de pagos.
«Necesitamos mucha mayor educación financiera» lo que hará que la gente «tenga un manejo responsable» puesto que muchas personas «todavía tiene que saber mejor cómo hacer cálculos de lo que implican las tasas de interés», por ejemplo.
Otra medida «es seguir con todo este impulso a estas nuevas tecnologías para tener más disponibilidad de opciones», añadió López. EFE