SANTO DOMINGO.- Los poderes Ejecutivo y Judicial celebraron este sábado actos por separado para conmemorar el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que adoptó las Naciones Unidas en homenaje a las hermanas dominicanas Patria, Minerva y María Teresa Mirabal, asesinadas durante las postrimerías de tiranía de Rafael Trujillo.
La vicepresidenta Raquel Peña expresó en un acto celebrado en Santo Domingo que cada feminicidio, cada violación, cada acoso callejero, impacta profundamente a la sociedad, y consideró que «deben ser reconocidos como graves problemas de Estado y de índole pública, que no pueden ser objeto de respuestas triviales».
Peña, de acuerdo a un comunicado de Presidencia, afirmó que la magnitud e impacto de la violencia requiere de una gran confluencia de voluntades de todos los sectores para que asuman un compromiso de país con la «erradicación de este grave problema social».
PIDEN TOMAR MEDIDAS PARA PREVENIR VIOLENCIA
En tanto, la ministra de la Mujer, Mayra Jiménez, llamó a los partidos, agrupaciones y movimientos políticos, para que tomen todas las medidas a su alcance, a los fines de prevenir la violencia política contra las mujeres en el contexto electoral.
«La violencia política está asociada a democracias débiles y excluyentes. Hoy pido a los partidos políticos que no nos nieguen a las mujeres el derecho que tenemos de vivir en igualdad», sostuvo Jiménez.
De esa actividad también participó la primera dama, Raquel Arbaje, precisó la información.
En otro acto, celebrado en Salcedo de donde eran oriundas las hermanas Mirabal, la hija de Minerva, la exdiputada Minou Tavárez Mirabal, dijo que las vidas de «las muchachas» con una trayectoria transparente, vertical, inefable, les otorgaron un lugar trascendente en la historia de la democracia de República Dominicana y del mundo.
De su lado, el presidente de la Suprema Corte de Justicia, Luis Henry Molina, aseguró que el asesinato de las hermanas Mirabal no extinguió su memoria y legado, porque el valor de su sacrificio hoy está cada día más vigente.
Afirmó, en documento enviado por la Suprema, que la incorporación de la perspectiva de género de manera transversal en la administración de justicia es una respuesta necesaria a la tragedia insistente de la violencia machista y de los feminicidios.
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