Las mascotas nos dan cariño, compañía y nos hacen muy felices, o al menos eso diría cualquier persona que tenga una. Pero, ¿y si esta afirmación no fuera del todo cierta? Los resultados de investigaciones pasadas suelen ser mixtos. Según informa Psychology Today, en una revisión de 54 estudios, sólo el 31% de los estudios encontró una relación positiva entre tener una mascota y la salud mental de los dueños; De hecho, el 9% de los estudios hallaron relaciones negativas. Sin embargo, los estudios realizados durante la pandemia sugieren que las mascotas pueden haber sido útiles durante la pandemia debido al aislamiento social generalizado.
Una nueva investigación ahora ha examinado más a fondo el papel que tuvieron las mascotas en el bienestar durante la pandemia teniendo en cuenta las características tanto de ellas como de sus dueños. Un total de 767 participantes de todo el mundo completaron cuestionarios sobre sus mascotas y su bienestar en mayo de 2020. La mayoría de los participantes eran estadounidenses (59%), españoles (19%) o canadienses (11%). Los participantes fueron encuestados sobre las características de las mascotas (si tenían una mascota, número, tipos, su relación mascota-humano…) y su propia personalidad (estilo de apego, los cinco rasgos de personalidad y otras…).
Las medidas de bienestar incluyeron bienestar subjetivo, propósito en la vida, afecto positivo y negativo, estrés, soledad y depresión. Además, los investigadores hicieron una pregunta abierta: (“Si desea decir algunas palabras sobre cómo tener una mascota le ha sido útil o no durante la época de la pandemia, no dude en hacerlo“) que codificaron cualitativamente. Los resultados indicaron que, en su mayor parte, tener una mascota no predecía el bienestar y, en general, no importaban la cantidad de mascotas, los tipos de mascotas, la relación con las mascotas y la personalidad del dueño.
Los resultados indicaron que, en su mayor parte, tener una mascota no predecía el bienestar
Hubo algunas pequeñas asociaciones entre tener un perro y el bienestar, de modo que efectivamente tener un perro sí parecía contribuir a una mayor satisfacción con la vida, un propósito un afecto positivo y menores grados de depresión. Sin embargo, todos estos efectos (excepto el efecto sobre la depresión) desaparecieron después de controlar las características del dueño, lo que sugiere que las personas con mayor bienestar tienen más probabilidades de tener perros o que las personas con ciertas características son más felices. Es decir, es más probable que si eres feliz tengas perro en lugar de que los perros hagan más feliz a la gente.
Aunque los participantes normalmente escribieron sobre los beneficios, las respuestas cualitativas revelaron tanto los beneficios como los costos de tener mascotas. En cuanto a los beneficios, los participantes enfatizaron más las emociones positivas (33%), seguidas del compañerismo (19%), el afecto (15%), el ejercicio (13%), el entretenimiento (12%), el sentido de propósito (10%), los abrazos ( 10%), alegría para los demás (7%), cómo afrontar el estrés o problemas de salud mental (7%), capacidad de respuesta/apoyo emocional (3%) y conexión social con otros dueños de mascotas (2%).
Los participantes a veces se sentían culpables por no poder pasar más tiempo con sus mascotas
En cuanto a los costos, no se mencionaron mucho pero sirven para entender por qué no necesariamente predicen un mayor bienestar. Los mencionados con más frecuencia fueron las emociones negativas como la culpa (6%), muerte/pérdida/separación (4%), interferencia con el trabajo (2%), limpiar los desechos de las mascotas (2%), empeoramiento de la salud, como por ejemplo por preocupación y falta de sueño (2%) y costos financieros de tener una mascota (1%). Por ejemplo, los participantes a veces se sentían culpables por no poder pasar más tiempo con sus mascotas. Otros se sentían estrasados por tener que limpiar sus cosas, estaban preocupados por su salud o por tener que ocuparse de sus mascotas financieramente hablando.
Los investigadores concluyeron que la gente piensa que las mascotas los hacen más felices, pero no es necesariamente así. Hay muchas variables involucradas en el bienestar de las personas más allá de las mascotas, que además suelen tener ventajas y desventajas. Por ejemplo, las personas que tienen mucho apego a las mascotas pueden no tener buenas relaciones con otros humanos. Y algunas características preexistentes pueden impulsarlas a adoptar mascotas.
De cualquier forma el estudio podría tener algunas limitaciones. Para obtener más información, los estudios futuros deberían preguntar directa y por separado sobre los aspectos negativos, y tal vez incluir una medida cuantitativa tanto de los pros como de los contras. Finalmente, para responder adecuadamente a la pregunta de si las mascotas mejoran nuestro bienestar, sería necesario realizar un experimento cuidadosamente controlado, que incluyera una asignación aleatoria a la propiedad de mascotas, pero un estudio así tendría importantes limitaciones y consideraciones éticas, por lo que el misterio (por ahora) continúa.
Las mascotas nos dan cariño, compañía y nos hacen muy felices, o al menos eso diría cualquier persona que tenga una. Pero, ¿y si esta afirmación no fuera del todo cierta? Los resultados de investigaciones pasadas suelen ser mixtos. Según informa Psychology Today, en una revisión de 54 estudios, sólo el 31% de los estudios encontró una relación positiva entre tener una mascota y la salud mental de los dueños; De hecho, el 9% de los estudios hallaron relaciones negativas. Sin embargo, los estudios realizados durante la pandemia sugieren que las mascotas pueden haber sido útiles durante la pandemia debido al aislamiento social generalizado.