El problema de la minería de Bitcoin en Paraguay con la proliferación de granjas para la minería de Bitcoin no es su legalidad o la tecnología, sino la falta de seguridad y corrupción en la gestión de la red eléctrica.
Así lo indicó Nelson Cristaldo, ingeniero en energía eléctrica y defensor de la actividad de minado. Según el experto, la proliferación de equipos para la minería de Bitcoin y el boom de inversiones en la industria. Todo ello deja al descubierto, tanto por el costo barato de la electricidad, como las vulnerabilidades del sistema.
“En Paraguay era demasiado sencillo ir a robar energía. Siempre lo fue, pero ahora está en una escala superior”, sostuvo el ingeniero, al ser consultado por la cruzada del gobierno paraguayo contra las granjas de minado de criptomonedas que operan en la ilegalidad.
El organismo que detecta granjas mineras de Bitcoin no autorizadas, incluso con Inteligencia Artificial, es la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), que al menos desde 2024, ya incautó más de 6.000 mineros.
Sin embargo, Cristaldo responsabilizó, tanto al ente regulador y autoridades de “la fiscalía por su complicidad”, como a aquellos que roban el suministro. “Hay cerca de 60 denuncias de la ANDE y no tenés solución. Nadie fue preso por robar millones de guaraníes por hora”, sostuvo en declaraciones a radio ABC Cardinal.
El ingeniero recordó que Paraguay es un “hub muy importante” para la minería de Bitcoin debido a su abundante” energía hidroeléctrica, “lo que ha atraído rápidamente a grandes multinacionales».
“Actualmente hay unas 55 empresas minando en Paraguay, de las cuales cuatro o cinco son las más grandes y predominantemente paraguayas. Estas inversiones son notables por su rapidez y magnitud en infraestructura”, sostuvo.
Cristaldo agregó que «estas empresas están estableciendo estaciones de 100 megavatios en apenas ocho meses, una tarea que normalmente lleva entre año y medio a dos años».
Este atractivo no solo se produjo ante las grandes compañías, sino también en las redes domésticas, con jóvenes que aprendieron a minar sencillamente desde una computadora gamer con GPU. Actualmente, solo es posible minar Bitcoin con equipos ASIC. “Había muchas monedas que se hacían en casas y nadie sabía”, puntualizó el experto.
Ahora bien, la base de la ola inversora de los últimos años tiene como fundamento la energía excedente que produce el Paraguay. «Tenemos tanta energía excedente que le estamos cediendo a Brasil por 10 dólares el megavatio hora. Igual con Argentina, que ni siquiera nos paga y nos debe 200 millones de dólares», mencionó Cristaldo.
«El gobierno finalmente se dio cuenta de que era más rentable vender esta energía a las empresas de minería de Bitcoin por 40 dólares más IVA», contrastó.
En este contexto, el gobierno paraguayo avanzó en los últimos meses con una mayor actividad de fiscalización y con propuestas legislativas. Tal como reportó CriptoNoticias, hay un intenso debate en el Parlamento local, con proyectos que buscan prohibir la industria relacionada con el activo digital.
Recientemente, la Cámara Paraguaya de Blockchain, una de las organizaciones que defiende la actividad minera en ese país, expresó su expectativa con que surja una norma que beneficie al sector y ataque al robo de energía, aunque también existe la posibilidad de que surjan mayores restricciones a la industria.
«La regulación y la legislación siempre están uno o diez pasos atrás del avance tecnológico. En Estados Unidos, les llevó mucho tiempo legislar y siguen ajustando sus regulaciones. Paraguay tardará en generar una buena legislación para este sector», advirtió Cristaldo.