La forma en que Steph Curry respondió la pregunta lo dice todo sobre quién es él como jugador de baloncesto y como persona.
Nunca confundas la sonrisa y la alegría infantil de Curry con la falta de competitividad. La superestrella de los Warriors tomará el corazón de un oponente directamente de su pecho y lo arrojará en una bolsa para llevar, al estilo de un Lloyd Christmas enojado, si se le reta a hacerlo. El curry también invita a la grandeza.
Él lo acoge con agrado y también se alimenta de él.
Ese ha sido el caso durante la última década al compartir la cancha junto a Klay Thompson y Draymond Green . Y lo mismo ocurre con sus tres temporadas como compañero de Kevin Durant, y el vínculo especial que creció entre él y Andre Iguodala durante ocho temporadas.
Por lo tanto, no fue una sorpresa que cuando se le preguntó con qué jugador en la historia de la NBA Curry desearía haber estado en la misma cancha, eligió tres y decidió que fueran compañeros de equipo en lugar de enemigos.
“Mis tres mejores, obviamente [Michael] Jordan, [Shaquille O’Neal] y probablemente diría Hakeem Olajuwon”, dijo Curry a NBC Sports Bay Area en el último episodio de “Dubs Talk”.
“Me gustaría jugar con esos tres muchachos, porque creo que con Jordan, todos queremos verlo de cerca y en persona. Y luego creo que el pick-and-roll conmigo y Hakeem o conmigo y Shaq sería prácticamente imparable”.
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Comenzando en orden, la primera opción de Curry es la que todos querrían ver. En casa o fuera, los estadios se llenarían con camisetas de Curry con el número 30 y camisetas de Jordan con el número 23.
Todo el mundo quería ser como Mike en los años 80 y 90, volando por el aire con la lengua fuera y una volcada destacada esperando a suceder.
Ahora es Curry quien influye en los fans de todos los tamaños, colores, edades y géneros. Es la estrella con la que los Warriors, y la NBA en su conjunto, pueden contar sus bendiciones por representar el juego.
No existe una emulación real de cómo Curry cambió el baloncesto detrás de la línea de 3 puntos, pero soñar con hacerlo al menos parece más alcanzable en un parque local que despegar desde la línea de tiros libres para una volcada como Jordan.
Además, el mayor poder de Curry es el que le faltaba al repertorio de Jordan, aunque el juego, por supuesto, fue muy diferente en sus 15 temporadas en la NBA. Jordan tuvo un 32,7 por ciento de triples en su carrera.
El nivel más bajo que Curry ha disparado desde lo profundo durante una temporada completa en su carrera es del 38,0 por ciento en su temporada de 33 años, lo que convierte a los dos en un equilibrio perfecto entre ellos en la defensa.
Dalton Johnson
NBC Sports Bay Area
