Por casi medio siglo, Manuel Mota ha contado con una compañera fiel, que lo conduce por los campos de béisbol de un lado hacia otro y contribuye para que a sus 87 años disfrute de magnifica salud.
Corría la etapa final de los 70´s cuando Peter O´Malley, ( fallecido en octubre de 1997), propietarios de los Dodgers, le obsequió una bicicleta en Vero Beach, antiguo campamento de entrenamiento, donde el club permaneció por 60 años.
De forma rápida, se convirtió en el vehículo en que el exquisito bateador se trasladaba por las variadas áreas, entre el campo, arboledas y frutales que provocaban la belleza ambiental en las instalaciones.
De tres ruedas y con un canasto delante, la bicicleta pasó a ser de gran utilidad para su trabajo, un gran maestro, quien en la última etapa de su carrera compartió el ser bateador emergente con el de coach e instructor de los noveles.
“Desde esa época tenía una variedad de funciones, pues aparte de que me ejercitaba y recorría las instalaciones , también en el canasto llevaba las pelotas y mis fongos (bates prácticas) con los cuales trabajaba con peloteros, veteranos y jóvenes”, sostiene Mota, tras conversar con Listín Diario desde su hogar en Los Angeles.
El de Mota con su bicicleta ha sido un amor que trasciende por casi medio siglo, aún la conserva y en magníficas condiciones. “Solo les hemos cambiado unas que otras gomas y darle su mano de pintura, en ella realizo variadas diligencias, claro en las inmediaciones del Dodger Stadium.

Manuel Mota figura montado en su triciclo en el cual se moviliza en el Dodgers Stadium y sus inmediaciones.
Tan importante ha sido que en variadas ocasiones la bici ha sido montada en avión desde Vero Beach a Los Angeles y también hacia Camelback Ranch, sede del equipo por las pasadas dos décadas. Tiene placa, bocina y sus luces
Sus soportes
Durante su carrera como instructor contribuyó en grandes para que dominicanos como Pedro Guerrero, Raúl Mondesí y Adrian Beltré se convirtieran en mejores peloteros.
Y mira que los hicieron, Guerrero fue de los héroes de la Serie Mundial de 1981, en tres ocasiones disparó 30 jonrones con los Esquivadores, equipo con el que bateó .309 de por vida, Mondesí conquistó el premio de Novato del Año en 1994. Y Adrian el año pasado fue instalado en Cooperstown.
Labores actuales
A sus 87 años recién cumplidos, se mantiene activo, sin la necesidad de usar ni muletas ni bastón, labora en el departamento de mercadeos de los actuales monarcas, los domingos tiene una sección en la transmisión en español de los Dodgers en la que conversa sobre grandes figuras del equipo y de otras franquicias.
“En la transmisión tengo bajo mi responsabilidad variadas historias, análisis y anécdotas , compartí cabina con mi hijo, José, en su momento lo hacía con Jaime Jarrín y hasta su deceso con Fernando Valenzuela”, expresa.
Es uno de los protagonistas para realizar servicios comunitarios en sectores de Los Angeles y muy por ejemplo lo ocurrido recientemente con los siniestros forestales que hace poco azotó gran parte de los suburbios de la ciudad.
Incluso, hace días representó a los Esquivadores en la celebración de un partido de béisbol en que participaron hijos de las familias afectadas por los fuegos.
Con frecuencia visitas escuelas, estadios de pequeñas ligas a cuyos niños les habla e instruye sobre béisbol.
Gran pesar
Manuel reside con su hija Cecilia, la mayor de sus ocho vástagos y en septiembre del 2023 falleció su esposa Margarita, quien fue su compañero de mas de 50 años.
“No tengo las palabras para expresar el dolor que me causó su despedida, era mi mayor motivación, y soporte durante mi carrera, con Margarita compartí los buenos y malos momentos”, sostiene el bateador de .304 en Grandes Ligas.