EL NUEVO DIARIO, FRANCIA.- Un grupo de científicos del Centro Nacional de Investigaciones Científicas (CNRS) francés ve «poco probable» que la contaminación atmosférica tenga incidencia en el alzheimer, en contra de un estudio de 2016 que apuntaba que la inhalación de partículas de magnetita provocaba degeneración neuronal.
Según su tesis, publicada hoy en la revista «Angewandte chimie international edition», hay que proceder a «una revisión» de los trabajos que vinculan la contaminación atmosférica y el agravamiento del alzheimer.
En un comunicado, el CNRS apunta que su equipo se ha dedicado a desmentir las conclusiones de un informe publicado en 2016 por un equipo internacional de investigadores.
Según este último, las partículas de magnetita presentes en la atmósfera podían penetrar en el cerebro por inhalación e interactuar con los amiloides, presentes en los pacientes con alzheimer.
Se apoyaban en otro estudio anterior, de 2007, según el cual la magnetita genera oxidación nefasta en esas proteínas cerebrales.
Concluían que «la penetración de magnetita en el cerebro y su fijación a los amiloides convertía a la polución atmosférica en la causa probable de la enfermedad del alzheimer».
Los científicos franceses, que han reproducido experiencias en condiciones idénticas a las fisiológicas, consideran que «la magnetita es incapaz de interactuar con el amiloide e inducir reacciones de oxidación».
A partir de esa constatación, concluyen que «es poco probable que la magnetita esté implicada en la degeneración neuronal» que provoca esa enfermedad.
«Este estudio debe conducir a una revisión cuidadosa de los trabajos que consideran peligrosa la magnetita en el cerebro humano», señalan.