Vestir a las niñas de rosa y a los niños de azul es algo que pasó de moda. Pero a partir de ese punto todo se complica a la hora de vestir a los pequeños, cuando las prendas no se compran en conjunto completo, pues las combinaciones fuera de los colores neutros, como el blanco, negro, gris y beige, pueden ser un poco cuesta arriba para las madres.
Saber combinar el color de la ropa de los niños puede parecer algo insignificante, pero tiene un impacto en el estado de ánimo y la actitud de los infantes.
El asesor de imagen Eddy Gómez afirma que la etapa de crecimiento y desarrollo (niñez y adolescencia) son la raíz del proceso de la creación del estilo personal en el individuo, por lo que durante los primeros 10 o 15 años de vida tendrá una influencia definitiva en el adulto y su manera de relacionarse con la moda y el estilo.
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“Uno de los principales factores de expresión es el color, por lo que permitir al niño e instruir a la misma vez sobre el correcto uso cromático será indispensable para evitar lo que hoy en día sucede; personas con miedo al color, miedo a arriesgarse y miedos a ser ellos mismos” afirmó el especialista.
Los padres siempre están pendiente de que sus pequeños estén bien vestidos y presentables, pero uno de los dolores de cabeza es encontrar en el closet la ropa deseada, por lo que Gómez reveló tres técnicas para clasificar la ropa de los niños por grupos de color que combinen:
Monocromático, que indica utilizar el mismo color en igualdad o diferencia de tonalidades.
Análogo que muestra que según la rueda cromática se pueden combinar dos colores que estén uno al lado del otro, y combinación complementaria, que propone combinar dos colores uno frente al otro, según la rueda cromática.
“De estas tres técnicas, la última suele ser la más utilizada por ser más llamativa y ‘divertida’. Por igual los infantes se identifican con ellas, porque son regularmente las armonías que se utilizan para espacios de recreación infantil y dibujos animados. Pero a su vez, la personalidad que va forjando el aún menor, influye bastante ya que mientras más introvertido sea, menos arriesgado a la vez será con el color, y en ese caso se le recomienda el efecto monocromático”, destacó.
Aunque por lo general los colores neutros son los preferidos a la hora de vestir a los niños, por ser clásicos, elegantes y fáciles de combinar; para aquellas madres que se les agotan las ideas en cuanto a mixturas de tonalidades, y que quieren arriesgarse, el estilista reveló siete mezclas de color unisex que vendrán geniales para esta temporada: rosa viejo con azul marino, Amarillo mostaza con verde pistacho; Azul grisáceo con azul marino, rojo con rosa fucsia; naranja ladrillo con amarillo pastel, amarillo pastel con verde militar y coral con verde pistacho.