Si bien siempre nos tomamos un desayuno antes de salir a la oficina o bien a la universidad, lo cierto es que en algún descanso que tengamos, no dudamos en tomarnos otro desayuno en la oficina o en la universidad para recargar fuerzas.
El problema, es que según un estudio realizado en Reino Unido, vía ladbible, es tanta la cantidad de bacterias que podemos encontrarnos en la sala de descanso de las oficinas, que tomarse allí un café o un té es lo más arriesgado que puedes hacer para tu salud.
Científicos del Reino Unido han encontrado evidencia de bacterias que generalmente se propagan a través de las heces y que han localizado en sitios como teteras, manijas de puertas y máquinas de café, así como botones de microondas.
“Estos resultados predicen que el personal no se lava las manos a fondo, o prácticamente nada, después de ir al baño”, señala Adam Roberts, microbiólogo de la Escuela de Medicina Tropical de Liverpool.
“El posible efecto colateral de esto es que, si una persona es más susceptible a la infección, si toca esas mismas superficies, puede correr el riesgo de enfermarse”, añade.
Las bacterias y microbios que encontraron
Para llegar a esa conclusión, el equipo de investigadores tomó hisopos de distintas áreas de la cocina, en espacios de oficinas y salas de descanso de trabajadores y encontraron varios tipos de bacterias, incluida E.coli, una bacteria común que causa enfermedades gastrointestinales como la diarrea.
Pero también localizaron pseudomonas relacionadas con infecciones respiratorias y Klebsiella, un microbio que se transmite a través de las heces y puede provocar neumonía.
También encontraron que cada artículo tenía presencia de hongos, siendo la manija de las puertas de la nevera, el principal foco de los mismos.
Así que, a modo de solución, los investigadores sugieren que la forma sencilla de tratar de minimizar este riesgo “es practicar una buena higiene de manos, tanto como sea posible”.
Por otra parte, la directora de salud pública de Warrington y comisionada de la investigación, Thara Raj, añade que las manijas de las puertas de la neveras, la máquinas de café y las teteras para el té parecían ser los lugares donde había la mayor cantidad de bacterias, “todos los cuales son elementos que probablemente tocaremos varias veces al día”.
“La clave para recordar es que estas bacterias son completamente invisibles a simple vista, por lo que, si bien estos artículos pueden parecer limpios, de hecho podrían ser el hogar de muchos microbios diferentes“, añade.
De esta forma, a no ser que confíes demasiado en tus compañeros de oficina, una vez que toques el botón del microondas, abras la nevera o utilices la máquina de café, siempre lávate las manos después.