FTX ha presentado una demanda ante el Tribunal de Quiebras de los Estados Unidos para el Distrito de Delaware contra algunas de las empresas de inversión a las que estaba vinculada antes de su quiebra. La demanda, presentada el 22 de junio, contiene 16 cargos y solicita más de USD 700 millones a los demandados.
En la demanda se nombraba como demandados a K5 Global -una incubadora y sociedad de inversión-, Mount Olympus Capital y SGN Albany Capital, así como a entidades afiliadas y a los copropietarios de K5 Global Michael Kives y Bryan Baum. Kives es un antiguo agente de la agencia de talentos CAA y ex asesor de Hilary Clinton. La demanda señalaba que el entonces CEO de FTX; Sam Bankman-Fried, asistió a un acto social organizado por Kives en 2022:
“Fiel a la reputación de Kives como un ‘super-red de contactos’ de alto perfil, los asistentes a la cena incluyeron a un ex candidato presidencial, actores y músicos de primer nivel, estrellas de reality shows y múltiples multimillonarios”.
Posteriormente, según la demanda, la empresa de trading de criptomonedas; Alameda Research, afiliada a FTX, transfirió USD 700 millones a Kives, Baum y K5 Global, pero éstos hicieron parecer que las operaciones procedían de las empresas fantasma SGN Albany y Mount Olympus Capital.
La demanda busca la devolución de los fondos transferidos desde Alameda Research que acabaron en SGN Albany Capital y los fondos transferidos desde Kives, Baum y SGN Albany Capital a Mount Olympus Capital.
Las transferencias se describieron como realizadas “sin recibir un valor equivalente” y, sobre todo, como anulables. En la legislación estadounidense sobre quiebras, una transacción anulable es aquella que puede revertirse en virtud del Código de Quiebras u otras leyes.
FTX moves to claw back $800 million from K5 Global, Olympus Capital, SGN Albany et al.
Defendants are further accused of aiding and abetting SBF, dishonest assistance and unjust enrichment. pic.twitter.com/IPcDEtuFxL
— FTX 2.0 Coalition (@AFTXcreditor) June 22, 2023
Kives, Baum y Bankman-Fried también desarrollaron estrechos vínculos personales, y Baum incluso tenía su propio cuarto en la residencia de los ejecutivos de FTX en Bahamas, según la demanda. Tras el colapso de FTX, “Kives y Baum trabajaron tras bastidores con Bankman-Fried en una estrategia para encontrar a alguien que rescatara al FTX Group (y proteger su gallina de los huevos de oro)”.
Nueve de los cargos se referían a transferencias de fondos. Kives y Buam fueron acusados personalmente de complicidad en el incumplimiento del deber fiduciario y asistencia deshonesta, y SGN Albany Capital fue acusada de enriquecimiento indebido.
Cointelegraph se puso en contacto con K5 Global para obtener comentarios, pero no recibió una respuesta inmediata.
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