Hoy los medios vuelven a poner el foco en Bill Gates, pero esta vez no ha sido para mencionar algunos de sus mantras, lecturas preferidas o trucos para lograr un éxito empresarial. En este caso, hablamos de algo más negativo para el fundador de Microsoft que se ha visto envuelto en una peliaguda entrevista.
Y es que, este tuvo que soportar una entrevista muy incómoda con la Australian Broadcasting Corporation el lunes 30 de enero por la noche. Entre otras cosas, se enfrentó a un interrogatorio sobre su supuesta relación con el multimillonario pedófilo Jeffrey Epstein.
El fundador de Microsoft y Epstein, el poderoso financiero que fue acusado de tráfico sexual de menores antes de morir, de un aparente suicidio, en una celda de la cárcel de Nueva York a la espera de juicio, se habían reunido en numerosas ocasiones a partir de 2011, según un informe del New York Times, lo que ya habría sido después de la primera condena de Epstein por solicitar prostitución a una menor en Florida.
Según informó The Daily Beast, Bill Gates se reunió con Epstein en su mansión neoyorquina del Upper East Side en septiembre de 2013. Le acompañaba su entonces esposa, Melinda Gates, quien, según el medio de comunicación, no le gustó en absoluto ese encuentro.
“Tuve varias cenas con él, ya sabes, con la esperanza de que surgiera lo que dijo sobre conseguir miles de millones de filantropía para la salud mundial a través de los contactos que tenía”, dijo Gates. “Cuando pareció que no era algo real, esa relación terminó”.
El multimillonario reconoció entonces que no debería haber cenado con él, durante un momento en mitad de la extensa entrevista con ABC Australia. Gates dijo a la presentadora Sarah Ferguson: “Estás retrocediendo en el tiempo, pero sí, lo diré por centésima vez, sí, no debería haber cenado con él”. Este fue el punto que más irritó al millonario (aunque como siempre, con una sonrisa).
“Siempre lamentaré el dolor que causé a Melinda y a nuestra familia”
Otro de los momentos más tensos (por el tema a tratar) también se vivió cuando se reveló que, tras su encuentro en casa de Epstein, Melinda supuestamente le dijo a Bill Gates que debía alejarse de él y que la hacía sentir incómoda, algo que, desde luego, debería haber hecho saltar la alarma de Gates. Recordemos que Epstein ya había sido condenado por primera vez.
“Uno de los temas que le han perseguido es su relación con Epstein. ¿Se arrepiente de la relación que mantuvo con él en contra del consejo y los deseos de Melinda?”, le preguntó la presentadora.
“Siempre lamentaré el dolor que causé a Melinda y a nuestra familia. Admiro a Melinda y todo lo que hace para mejorar la vida de mujeres y niñas de todo el mundo, y estoy agradecido por el trabajo que seguimos haciendo juntos en nuestra fundación”, explicó.
La Fundación Bill y Melinda Gates en el punto de mira por su relación con Epstein
Otro de los puntos entonces tocados fue el de esta relación de Epstein con la fundación de la pareja Gates. Se dice que la Fundación Bill y Melinda Gates inició conversaciones con JPMorgan sobre 2011 para la creación de una organización benéfica mundial que financiaría proyectos sanitarios en países pobres. Epstein quería participar en la empresa ya que tenía millones de dólares en cuentas de JPMorgan y mucha influencia en el banco de inversiones.
Sin embargo, en 2014, The New York Times señaló que la pareja parecía haber dejado de reunirse. Al parecer, Epstein incluso se quejó a sus amigos de que Gates había dejado de hablarle, aunque ya fue en 2019 cuando se presentaron el resto de cargos contra este personaje.
Y es que, no es para menos ya que parece que el objetivo de Epstein difería bastante de un tema de caridad. Este propuso solicitar donaciones a sus amigos millonarios para ayudar a financiar los proyectos y a cambio, por cualquier cantidad de dinero que recaudara, quería una comisión del 0,3 %.
Un pequeño matiz a modo de opinión, y es que, como dice el refrán, “no hay mal que por bien no venga”, ya que JPMorgan también fue acusado en su momento de facilitar la trama de tráfico sexual de Jeffrey Epstein y de encubrirla. Si estos negocios entre Gates, Epstein y JPMorgan hubiesen llegado a buen puerto, la reputación del fundador de Microsoft se hubiese manchado por completo.
Según The Times, Bill Gates en ningún momento supo que Epstein pretendía beneficiarse de la caridad, aunque parece que nunca llegaremos a conocer la verdad real de todo. Igualmente todo fue cortado antes de que fuese demasiado tarde.
Como era de esperar, a partir de enterarse de los negocios a escondidas de Epstein, empezaron a dudar de su credibilidad y como resultado, el fondo benéfico nunca se materializó y las relaciones se rompieron. Con todo esto, no nos cabe duda de que fue un error de Bill Gates, pero como el de tantos otros que confiaron en Epstein.
